Adiós a las supersticiones: las celebrities se rinden ante el amarillo

El color amarillo es uno de los más llamativos del mundo, pero es muy poco utilizado por la fuerte carga de superstición que lleva detrás. En moda siempre se ha señalado que vestir de esta tonalidad da mala suerte, por lo que mucha gente lo rechaza y nunca lo incorpora a su armario.

A pesar de ello, son muchas las que se apuestan por él para acudir a eventos y deslumbrar. Las celebrities de todo el mundo ya se han decantado por el amarillo y, sin duda, muchas de ellas han acertado de lleno con diseños muy especiales de numerosas firmas y no solo con vestidos, también con accesorios.

Por ello, las marcas tampoco han escapado de este color. Valentino, Prada, Rosa Clará, Gucci y un largo etcétera no dudan en presentar diseños teñidos de esta tonalidad en sus diferentes Fashion Weeks o colecciónes. ¿Quién no recuerda la mítica chaqueta amarilla de Zara?

Color arriesgado

Los vestidos amarillos siempre han existido, pero fue en 1992 cuando se popularizó. ¿El motivo? La película 'La Bella y la Bestia', cuando Disney vistió a la princesa del film con un espectacular vestido de esta tonalidad. Ahora, años más tarde y con motivo del estreno de una nueva entrega protagonizada por Emma Watson, vuelve a estar en el punto de mira. Y es que no hay duda de que la actriz está muy favorecida con esta prenda que, indudablemente, dará mucho que hablar.

Se trata de un color bastante arriesgado que muchas famosas intentan evitar, pero puede conformar looks bastante femeninos y sofisticados. El amarillo transmite alegría, aporta luminosidad al rostro y proyecta mucha juventud. A pesar de ello, el exceso puede provocar agotamiento y confusión, por lo que hay que saber combinarlo y utlizarlo correctamente.

Las supersticiones apuntan a que es uno de los colores que más mala suerte da. La razón proviene del mundo del teatro, y hay que remontarse a la época de Molierè ya que falleció interpretando la obra 'El enfermo imaginario' y, adivina, ¡iba vestido de amarillo!

Las celebrities internacionales vencen a las supersticiones

Desde hace varias temporadas son muchas las famosas que han vencido a las supersticiones y han incorporado entre sus prendas favoritas este color tan especial. Hay numerosos ejemplos del panorama nacional e internacional y algunas de ellas han sido incluso consagradas como las mejor vestidas de los eventos a los que han asistido.

Con motivo de los pasados Globos de Oro, celebrities como Natalie Portman, Reese Witherspoon o Viola Davis lucieron vestidos deslumbrantes de esta tonalidad. Todas ellas iban vestidas con diseños de marcas conocidas, aunque no fueron las pioneras en hacerlo. El año pasado fue Jennifer Lopez la que acudió a este mismo evento con un vestido de Giambattista Valli ante la atónita mirada de los presentes.

Otros ejemplos internacionales van desde Gigi Hadid, en los Video Music Awards de 2015 hasta Heidi Klum, Blake Lively o Anna Safroncik. En otros premios, como en los Emmy 2016, este color no pasó desapercibido de la mano de Keltie Knigh o Taraji P. Henson.

Paula Echevarría o Blanca Suárez: el panorama nacional

Por su parte, otras famosas españolas también se han sumado a esta tendencia tan especial. Viendo estos looks, no hay duda de que el amarillo es un color que deja huella y se queda grabado en nuestra retina.

Cabe destacar a Paula Echevarría y su vestido de escote en forma de V para asistir al Festival de Vitoria, Inma Cuesta en el Festival de San Sebastián, Blanca Suárez o Beatriz Luengo, quienes coincidieron en gustos al llevar el mismo vestido de Fernando Claro.

Penélope Cruz fue una de las mejor vestidas de la premiere de 'Soy uno entre cien mil' gracias a un vestido de corte mini de Carolina Herrera, mientras que Berta Collado lo lució en un jersey de punto en la presentación de 'Poder canijo'.

Premios tan importantes como los Goya 2016, que también recibieron este color con Manuela Vellés y un vestido de corte griego firmado por Cortana, o los Premios Feroz 2016 con Bárbara Santa Cruz y un diseño de Iván Campaña.