Bajo el manto del recuerdo de las ruinas griegas y la historia de una sociedad que brindó tributo, entre muchas cosas a la belleza, el Gran Palais de París fue testigo del desfile Crucero 2018 de Chanel. La puesta en escena que ideó el Kaiser antes de empezar el espectáculo ya posicionaba unas expectativas muy altas, sin embargo, lo que ocurrió después lo superó con creces.
Un despliegue de 'afroditas' hizo que el desfile comenzara a cobrar esa magia que tan solo Chanel sabe introducir en cada uno de sus catwalk. Aire mediterráneo que combinaba con unas prendas inspiradas en la belleza de las diosas griegas, donde las sandalias de gladiador se plantaron como protagonistas. Y es que el director creativo de Chanel, Karl Lagerfeld, se ha convertido en el ser capaz de fusionar lo moderno con el recuerdo de lo mítico conseguir resultados como el desfile Crucero 2018 de la Casa de Moda.
Oda a las diosas griegas
La esencia de Chanel se hizo presente en cada una de las propuestas en este nuevo desfile de la firma parisina. El corte clásico, el tweed y las texturas de la Casa Chanel protagonizaron un desfile lleno de historia, moda y elegancia, eso sí, sin olvidar ese toque de color que el Kaiser decidió introducir en los complementos que portaban las modelos.
Los estampados de las prendas rendían especial homenaje a los atardeceres de la Antigua Grecia, y otros, a las túnicas griegas que tanto han influido en la historia de la moda. Un auténtico espectáculo que ha desplegado no solo la colección Crucero 2018 de Chanel, sino también esa inspiración y respeto por el arte.