Galería: De plebeyas a princesas en 2011
¿Quién de nosotras no ha soñado alguna vez con ser princesas por un día? Que aparezca nuestro príncipe azul y nos colme de regalos y llene nuestro fondo de armario de impresionantes vestidos... Bien, es difícil, pero no imposible, sino mirad a Charlene Wittstock y Kate Middleton, plebeyas hasta hace pocos meses, que han visto cumplidos sus sueños y se han convertido en princesas herederas.
Estas dos mujeres, mucho antes de verse ataviada con las mejores galas y examinadas por los más críticos estilistas, se vestían ellas mismas, sin consejeros de por medio, únicamente con su gusto personal. Y claro, muchas veces pasan factura estos 'patinazos' estilísticos y son vistas en medio mundo con looks más propio de chonis y mujeres sin gusto ninguno.
Sin embargo, ambas princesas, nada más hacer público su compromiso con sendos príncipes, han visto como su armario ha cambiado de la noche a la mañana, viéndose ahora repleto de maravillosos vestidos de gala y conjunto tipo cóctel para sus múltiples actos oficiales.
El cambio de vestuario de Kate Middleton
Kate Middleton (a partir de ahora llamémosla Catalina de Cambridge) es la mujer que más ha evolucionado en su forma de vestir desde que se hiciera pública su relación con el príncipe Guillermo de Inglaterra. Al conocerse esta temprana relación, Catalina era una joven estudiante universitaria que conocía poco, muy poco, los entresijos de la moda. Por ello, la hemos visto con looks de todas las formas y colores, escogiendo estilismos nada favorecedores y fuera de lugar. ¿Quién si no puede olvidar esa imagen en que pudimos verla con shorts amarillos, botas negras y camiseta de lentejuelas verde con cuello halter?
Hoy en día, sin embargo, es una de las princesas de la corte mejor vestidas del momento. Tanto, que acapara los primeros puestos de las mejor vestidas dentro de la realeza europea. Sus vestidos se han visto depurados de estampados, líneas y colores, consiguiendo un vestuario donde los tonos neutros y los colores pastel son sus mejores aliados.
El cambio de vestuario de Charlene Wittstock
Por su parte, Charlene Wittstock (véase Charlene de Mónaco, desde su casamiento real con el príncipe Alberto de Mónaco) también ha visto mejorado su estilo a la hora de vestir. Nadadora de profesión, Charlene tiene una espalda muy ancha para su esbelto cuerpo, por lo que antes, poco conocedora de las prendas que mejor le sientan, se vestía con ropa que destacaba demasiado esa parte de su anatomía. Además, escogía demasiado brillos y prendas oversize que no le favorecían en absoluto.
Ahora, en cambio, es la princesa del pequeño principado mejor vestida de todas. Escoge sus outfits con el mayor de los gustos y siempre brilla con luz propia allá donde se deja ver. Ha depurado sus vestidos, haciéndolos más sencillos y elegantes y ha escogido, en muchas más ocasiones que cuando estaba soltera, looks tipo 'working girl', con pantalones de pinzas y blazer, que destacan favorablemente sus curvas. Sus bellas facciones y su melena rubia no hacen más que acrecentar el estilo de esta princesa, erigida como una de las más guapas de las Coronas europeas.
Todas, si nos lo proponemos, podemos llegar a ser unas princesas. Si no unas de alguna Casa Real europea, al menos, en nuestro propio cuento, ¿no?