Con el invierno llega la temporada de la ropa caliente, los tejidos gruesos y los looks para combatir el frío. El problema de esta época es que muchas veces no sabemos qué ponernos y optamos por la solución más fácil : utilizar piezas que nos poníamos en otras estaciones e ir añadiendo más y más capas. Primer error. La moda (la funcional, la del día a día) tiene unas normas básicas para que a la hora de vestir todo sea mucho más fácil y cómodo.
Consejos para vestir abrigado y bien al mismo tiempo
Seleccionar la ropa adecuada
- Descartar las prendas finas y frescas, aquellas que se utilizan en otras estaciones. Si se pueden seguir vistiendo las más ajustadas como ropa interior, siempre. Obviamente, fuera de las finas se quedan la s piezas térmicas que también lo son, pero a su vez abrigan. Protegen perfectamente y mantienen el cuerpo caliente sin necesidad de utilizar varias prendas unas encima de otras.
- Usar prendas de materiales típicos del invierno como son la lana, el pelo y el plumón, aunque también se puede elegir un tipo de algodón que sea más grueso que el que se utiliza de manera habitual en otras piezas básicas.
- El corte también es importante. Los cuellos muy anchos, las mangas acampanadas o la ropa más amplia puede dar la sensación de agobio y que parezca que se va con muchas más capas de las que realmente se llevan.
Para evitar sentirse como una cebolla, la solución es simple: saber combinar tejidos y utilizar la menor cantidad de ropa necesaria. Porque no por más vas a sentir menos frío.
Jersey como principal aliado
- El look perfecto para estas ocasiones donde ser quiere vestir más arreglada es combinarlo con la ropa de oficina, que tiende a ser muy fina en el caso femenino -lo masculino añade la americana y la corbata, que aportan más calor al cuerpo-, aunque solo si después se va a permanecer dentro de un lugar resguardado y caliente. A la hora de salir a la calle, lo mejor sería seleccionar una pieza de abrigo bien caliente, aunque sea más gruesa, para contrarrestar el frío del invierno.
- Para un estilo más casual, en vez de abrigos se pueden seleccionar prendas como las chaquetas de tipo biker. Estas son piezas de abrigo ideales, aunque pueden ser un poco pesadas. Protegen perfectamente del frío y ayudan a que el viento no se cale en los huesos, por eso se utilizan para la carretera. Los hay de todo tipo y estilo.
Arriba, abrigo; abajo, prendas tupidas
En el caso de las piernas, los pantalones de materiales resistentes y los leggins realizados en algodón grueso son las mejores opciones para mantenerse calientes. Los pantalones vaqueros, a diferencia de lo que se cree, a veces no son la mejor opción. Más allá de que sean largos y gruesos, el material vaquero es bastante frío y para calentarse tiene que aprovechare del que desprende el propio cuerpo, por lo que a veces puede ser contraproducente.
El toque final
- Calzado
Para completar el look de invierno lo mejor es calzarse unas buenas botas o unas deportivas de vestir, ambas que sean calientes y cómodas. Las de estilo militar para las primeras y las más modernas y cosmopolitas -a poder ser que su forro no sea de tela, que es más fresca- para el segundo modelo son ideales.
- Complementos
Para que los pies no sufran tanto, existen calcetines térmicos que pueden ayudar en caso de que se sufra más de lo normal con el invierno. Aunque el look no sería nada sin los accesorios adecuados. Los gorros ajustados, los guantes finos y resistentes y las maxi bufandas tipo manta pueden ser los grandes aliados.