El estilo de Heidi Klum

Heidi Klum es una de las modelos internacionales más codiciadas del mundo. Además de por su belleza, la celebrity ha sido presentadora y ejemplo a seguir para muchas mujeres del mundo. Tras sus muchos años en los que su popularidad ha ido aumentando, el estilo de la maniquí ha evolucionado para bien y siempre ha sido portadora de grandes marcas y diseños.

Analizamos su envidiado estilo, no solamente por los excelentes vestidos lucidos durante los actos oficiales, sino también por sus acertados looks de calle y sus originales disfraces en las famosas fiestas de Halloween a las que siempre acude.

Sus looks sobre la alfombra roja

Desde que se hiciese famosa cuando era joven la modelo y presentadora Heidi Klum ha ido aprendiendo sobre moda y estilismos. Al principio, sus looks eran más sencillos, pero a medida que fue creciendo su fama sus vestidos mejoraron, se hizo más atrevida y nos deslumbró con magníficos atuendos.

Fue durante su relación sentimental con el cantante Seal que Hedi Klum apareció sobre la alfombra roja con su pareja enfundada en un espectacular y atrevido vestido de color plateado. Lejos de ser poco elegante, la modelo y presentadora fue un claro ejemplo de que no importa el color o el material del vestido si es escogido y combinado con elegancia.

No obstante, como todos, a veces se ha arriesgado demasiado con su ropa y no ha sido digna de ser una verdadera it-girl. Aunque los colores sobrios gustan, el rizado y el volumen extremo del vestido corto que lució en la gala de los premios EMY del 2011 no fue su mejor elección.

Por el contrario, días después nos sorprendió en la gala Amfar de la semana de la moda de Milán con un vestido del mismo color, con rizado en el largo, pero mucho más elegante, el cual acompañó con una melena suelta natural y un excelente maquillaje.

Amante del plateado y los colores claros, Hedi Klum nos sorprendió con un vestido galáctico con aperturas que dejaban entrever el encaje azul marino que llevaba debajo, pero que no dejaba de tener un toque fashion y divertido durante la celebración de los American Music Awards del 2011.

La elegancia pasó a un segundo plano durante el año siguiente y la modelo se enfundó más de una modelito poco acertado, como en la fiesta celebrada por el cantante Elton John. Un vestido amarillo, de tela plastificada y con unas aperturas nada favorecedoras hicieron que luciera uno de sus peores looks.

Si embargo, pronto supo arreglar este desliz y se presentó con un bonito y sencillo vestido de color salmón a los globos de oro muy bien combinado con pedrería de color azul turquesa. En la gala MET del 2012 nos sorprendió con un bonito vestido de encaje de color violeta que, a la vez de ser bonito y elegante, no hacía una buena combinación con su color de piel, por eso es normal verla lucir colores claros y plateados, pues le dan mejor color a su rostro y potencian su belleza natural.

Ejemplo de ello es el vestido que lució ese mismo año durante el festival de Cannes, de color plateado, con unos largos pendientes del mismo color que resaltan la belleza de sus ojos miel y su pelo dorado.

Como buena rubia, el rosa y el fucsia son colores que le quedan realmente bien, por eso no dudó en ponerse un bonito vestido lencero para su primera presentación de la línea de ropa para niños de la que fue protagonista.

A medida que van pasando los años, Klum se decanta por los vestidos dorados y blancos. Le gusta mostrar su esbelta figura, pero no siempre lo hace con acierto. Durante la gala de los Globos de Oro del 2013 nos fascinó con un vestido voluminoso con una gran apertura en la pierna y un bonito reborde de oro en la zona del pecho asimétrico.

No obstante, nada acertado fue su vestido dorado para la fiesta de Elton John de ese mismo año. El escote era demasiado marcado y el vestido poco elegante al ser demasiado brillante, por lo que a pesar de mostrar un espectacular figura, la elección fue un completo error.

Extraño fue también el vestido que llevó para el mismo evento del año siguiente. Negro, con un corsé de plástico a piezas, hizo que no pasara desapercibida, pero de nuevo no fue uno de sus mejores looks.

Más guapa que nunca se presentó la modelo a los Premios Emmy de las artes creativas del 2014. Un excelente vestido con flecos de color azul y una alta coleta reflejaban un bonito estilo a la vez que realzaba su definida figura. Fue protagonista de las mejores fotos de la noche, puesto que el vestido provocó críticas muy positivas.

El estilo de la alemana no hace más que mejorar con los años y lo demostró durante la gala de los Globos de Oro del 2015 a la cual se presentó con un precioso vestido rojo, combinado con unos labios del mismo color y un acertado peinado a los años cincuenta, con la melena a un lado y unas marcadas y bonitas ondas haciéndola brillar y ser la más bella de la fiesta.

Sus mejores looks de calle

Desde que saltase a la fama, la modelo ha sido siempre muy celosa de su intimidad. Sin embargo, no pudo evitar tener todas las cámaras detrás cuando empezó su relación sentimental más conocida con el cantante Seal. Con él formó una bella familia y, aunque ella ya tenía otro hijo con su anterior pareja, ambos tuvieron otros dos hijos más. Era de lo más común verlos pasear por el parque en sus días libres, en los cuales la modelo lucía un look relajado: pantalones vaqueros, beanies de lana y gafas de sol.

Sin embargo, sus atuendos para la calle no son siempre tan casual y discretos. Para la presentación de su futura fiesta de Halloween en el 2011 llevó un nada acertado modelo de mallas con estampado de leopardo gris, un blusón con estampado de serpiente del mismo color y unas botas bajas negras. Nada chic en comparación con la mayoría de los looks a los cuales nos tiene acostumbrados.

Durante el mismo año y con motivo de celebración del día de los muertos fue acompañada de su familia a comprar una calabaza y, en esta ocasión, sí supo combinar perfectamente un vestido vaporoso con un chaleco sin mangas de piel negro y sus indiscutibles gafas de sol de aviador, creando un look de calle perfecto.

Un fabuloso look para la llegada al aeropuerto fue el que llevó en el año 2012. Unas gafas de sol, unos vaqueros, zapato plano, camiseta gótica y gorro de color negro fueron un gran acierto para un estilismo cómodo y muy a la moda.

Junto a su nueva y actual pareja, Hedi Klum se muestra mucho más natural y relajada con sus looks de calle. Normalmente, la podemos ver luciendo unos vaqueros, unas zapatillas deportivas y una ancha y cómoda camiseta.

Eso refleja que, aunque le gusta mucho cuidar de sus looks en la alfombra roja, la modelo opta por combinaciones convencionales y cómodas para su vida diaria, ya que es una madre de familia y le gusta llevar una vida bastante desapercibida y tranquila junto a sus seres queridos.

Los increíbles disfraces de Halloween

Sin duda alguna, Heidi Klum es la reina de los disfraces de Halloween año tras otro y no por su elegancia, sino por su originalidad. El más impresionante de todos fue el que lució en el año 2011, simplemente maquillaje corporal con tal de recrear un cuerpo humano sin piel, solo músculos.

No solamente en Halloween se disfraza la bella modelo. T ambién para la navidad de ese mismo año decidió plantarse un traje de mamá Noel para dedicarnos unas felices fiestas a todos.

Heidi Klum siente verdadera pasión por los disfraces y por eso también se presentó a la gala de UNICEF del 2012 con un gorro de india que la hizo ser el centro de atención.

El año 2012 deslumbró en la fiesta de Halloween con un vestido dorado con un gran sombrero de Cleopatra. Mantuvo su melena rubia natural y utilizó un maquillaje muy minimal, lejos de la típica imagen que tenemos de la Cleopatra convencional. No obstante, como siempre su disfraz fue uno de los más admirados.

Boquiabiertos nos dejó en el año 2014 cuando se disfrazó de anciana para la fiesta del día de los muertos. Tan logrado era el maquillaje y la caracterización que parecía mentira que detrás se escondiera la hermosa modelo y presentadora Hedi Klum.

Sin duda, es la que mejor sabe escoger sus atuendos para dicha fiesta, ya que lo que quiere es impresionar y no simplemente demostrar su belleza, de la que todos ya somos conscientes durante todos los días del año.