Galería: Grace Kelly, un icono de la moda
Aunque comenzó su carrera como modelo publicitaria, pronto descubrió su verdadera vocación, la interpretación. Se consagró como diosa de Hollywood y de Alfred Hitchock gracias a su belleza y su indiscutible elegancia. 'La ventana indiscreta', 'Crimen perfecto', 'Mogambo'... fueron algunos de los títulos que le llevaron al éxito.
Pero fue durante el rodaje de 'Atrapa a un ladrón', que tenía lugar en Mónaco, cuando Rainero quedó prendado del encanto de la actriz. El príncipe logró conquistarla y el 18 de abril de 1956, ambos contraían matrimonio en el Palacio de Mónaco.
A partir de ese momento Grace Kelly dejaba a un lado su carrera cinematográfica para dedicarse de lleno a su familia y a su país. Pero algo de lo que jamás se desprendió, fue de su incuestionable estilo y elegancia.
La legendaria diseñadora de vestuario Edith Heath, que logró un Oscar en ocho ocasiones no se tomo demasiado bien que Grace no la escogiera para crear su vestido de novia y es que fue ella la responsable de algunos de los diseños más espectaculares que la actriz lució durante su carrera. Sólo hay que echar un vistazo a películas como 'La ventana indiscreta' o 'Atrapa a un ladrón' para disfrutar del maravilloso vestuario que salió del taller de Heath y que Grace Kelly supo lucir como nadie.
Un icono en la actualidad
Todos recordamos esos vestidos por debajo de la rodilla, esas faldas que se ceñían a su cintura y como no, la clásica rebeca que rápidamente se convirtió en todo un básico para las mujeres de la época.
Hizo que el bolso ' Haut à courroies ' de Hermès se convirtiera como ella, en todo un icono el día que posó cubriendo con él su embarazo en la revista Life. Debido a dicha repercusión, la casa bautizó a aquel bolso con su nombre, una pieza que hoy día sigue siendo todo un emblema.
Y es que si analizamos algunas de las tendencias que hoy en día forman parte de nuestro armario, ya las había la Princesa de Mónaco hace más de 30 años, desde las blusas con lazo, los mocasines, los pantalones de talle alto o las gafas tipo cat eye a las que Olivia Palermo es adicta, son algunas de las prendas o accesorios a las que Grace Kelly ya se adelantó por aquel entonces.