Atrás quedó la ya ex Primera Dama Michelle Obama y su estilo elegante, sofisticado y, a menudo, bastante sobrio. Ha sido galardonada en más de una ocasión como una de las mejor vestidas del planeta, por lo que ha dejado en su puesto el listón muy alto.
Su sucesora, Melania Trump, no se queda atrás. El estilo refinado de la exmodelo se ha ido consolidando a lo largo de la campaña electoral del elegido Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, donde ha dado varios discursos.
Su marcado pasado como top model, las diferentes apariciones en las portadas de las más prestigiosas revistas de moda y su aparición en varias pasarelas dejan patente que está más que metida en el mundo de las tendencias. Por ello, se espera que se convierta en un referente y, quién sabe, quizá en un icono por su vestuario.
El pasado de Melania Trump
Los marcados rasgos de Trump, grandes ojos verdes y espetacular figura le llevaron a introducirse en la moda a los 16 años, aunque no fue hasta dos años más tarde cuando saltó a la fama. Desde entonces la exmodelo eslovena ha estado muy vinculada con la industria y ha acaparado en más de una ocasión las miradas de todo el mundo.
Fue en 2008 cuando contrajo matrimonio con Donald Trump y su vida dio un gran giro. En los primeros años que se le podía ver en diferentes eventos y pasarelas solía escoger un estilo más extravagante, con escotes pronunciados, telas brillantes y pieles.
En estos primeros años de relación solía marcar su silueta con vestidos ceñidos y tejidos que componían looks muy sexys. Sin embargo, a lo largo de la campaña electoral se ha dejado ver con un estilo completamente diferente al que estabamos acostumbrados: los escotes se cerraron, las prendas se volvieron más sobrias y mostraba unos outfits más elegantes.
El elegante estilo actual
Cuando comenzó la campaña y la carrera hacia la presidencia de los Estados Unidos, Melania Trump permanecía a la sombra de su marido. Pero poco a poco, la tercera mujer de Donald Trump, comenzó a dar sus propios discursos y tuvo un papel muy importante en estas jornadas.
Para realizar estas apariciones públicas optó por lucir un estilo más distinguido que el que tenía en sus inicios. Esta evolución se ha podido ver por los diferentes looks que ha escogido, en los que destaca el paño, los abrigos oversize, el monocolor y el pelo suelto.
Las prendas preferidas de Trump son, indudablemente, los vestidos. De diferentes colores y formas, suelen tener un corte midi e ir combinados con stilettos, sobre todo con los de Christian Louboutin.
¿Sus firmas de cabecera? Desde Louis Vuitton hasta Gucci pasando por Dior, Michael Kors y Balmain. Conoce los diseñadores y sabe escoger bien gracias a su pasado como modelo pero, como ha afirmado en varias ocasiones, su marca favorita es Valentino.
Vestuario significativo
No es de extrañar que los políticos lancen mensajes a través de su vestuario. Muchas veces no hacen falta palabras para expresar ideas, y Melania Trump estuvo en el punto de mira en diferentes ocasiones por la ropa que escogió en varios mítines.
Todo el mundo recuerda la camisa rosa fucsia de la firma Gucci con una lazada al cuello, comunmente llamada 'Pussy Bow'. Este tipo de escote fue utilizado por las feministas, como un símbolo para las primeras mujeres ejecutivas de los años 70. ¿Casualidad? Lo cierto es que muchos medios apuntaron a que todo era propio de una estrategia para desvincular a Donald Trump de las acusaciones de machismo. Esta lazada fue utilizada en otro vestido, esta vez de color negro, pero de una manera más sutil.
Especial mención tiene el vestido que escogió en julio para el discurso que dio en la Convención Republicana, que fue acusado de plagio ya que era bastante similar a uno que ofreció Michelle Obama. Esta pieza de la firma Roksanda se agotó en menos de 24 horas.
Su última aparición fue el pasado 9 de noviembre, en el primer discurso de Donald Trump como Presidente. Fue en esta ocasión cuando le pudimos ver con un espectacular mono blanco de Ralph Lauren, color significativo ya que muchos críticos lo han definido como una salida de las sombras de su marido.