Llega el verano y con él las tendencias en traje de baño, los aliados perfectos para ir a la playa o la piscina causando sensación. Pero, ¿qué tipo de complemento queda mejor? Con cada nuevo año, las tendencias cambian y con ellas las formas de llevar un bikini, un trikini o un monokini. Sí, monokini.
Esta última está poniéndose de moda de nuevo, aunque su historia se remonta a los años 60, el monokini supuso todo un hito en la historia del diseño, la vanguardia y -por supuesto- las reivindicaciones femeninas. La sensación más arriesgada y sexy en cuanto a traje de baño se refiere, llega este verano para ser el más adorado por todas.
Prenda femenina por excelencia
El monokini nace de la reivindicación del feminismo, pero también como expresión del cuerpo. En su esencia principal, la braga de talle alto hasta la cintura y la tira atada al cuello era toda la tela que se encontraba en esta pieza. Al contrario que sus primos, el trikini y el bikini, su intención no era la sensualidad de esconder pubis y pecho, sino que dejaba al aire gran parte del cuerpo femenino. Sin nada que esconder no hay vergüenza.
Así nació todo un icono de rebeldía. Por ello, el traje de baño dejó de ser un complemento más o una pieza que mojar en la playa o la piscina, sino que llegó a ser toda un revolución en la historia de la moda. Tanto por su estética contraria a las clásicas faldas y vestidos que caracterizaban los principios de siglo, como por su mensaje transgresor.
Diferente del resto
Teniendo como reflejo al tradicional bikini -compuesto por dos partes: una braga y un sujetador- y al sensual trikini -un bañador sin los costados, uniendo las dos partes por una tira central-, el monokini se entiende como una tela fina y con poca superficie que cubre apenas lo esencial.
Hoy en día, se suelen confundir entre trikini y monokini, pero la diferencia es clara. Mientras que el primero es la unión de las dos partes del traje de baño mediante una tira central, como si se hubiera prescindido de la tela de los costados del clásico bañador; el segundo es la unión de la braga y el pecho mediante tiras, formas o cruzados por toda la superficie del cuerpo.
Las formas que adquiere un monokini son diversas. Los hay con añadidos de crochet, de tiras cruzadas por el pecho, con cuello en U o en V, von volantes que unen pecho y vientre, con la espalda totalmente descubierta o en forma 'halter' (cruzado por detrás para dejar la barriga al aire). Sus estampados son arriesgados y diferentes entre sí: desde los colores mate y neutros hasta los más llamativos o los print animal.
Este tipo de traje de baño compite este verano directamente con el extendido bikini y con el elegante trikini. Lo que hace de especial al monokini es la esencia de una sola pieza, pero elevada al máximo exponente de la originalidad e imaginación, ya que se puede encontrar en tantas variedades y modelos como se quiera.
La comodidad, ligereza y estética que derivan de este están al alcance de cualquier cuerpo, ya que estiliza y se adapta a cualquier fisonomía femenina. Con él no hace falta estar delgada para sentirse sexy con un traje de baño. Ahora el atrevimiento se puede disfrutar con el monokini, que viene pisando fuerte para esta nueva temporada estival.
Breve historia de un icono
Nació de la mano e ingenio del diseñador austriaco Rudi Gernreich en 1964. Como principal mensaje, el monokini se desarrolló en una época transgresora y reivindicativa para con los derechos sociales y, sobre todo, de las mujeres. En medio de una sociedad represiva, algunos de los iconos del momento se sumaron a la causa de este nuevo traje de baño.
b>Peggy Moffit fue la primera mujer que se lanzó a lucir este arriesgado complemento femenino. Tal fue la repercusión, que su portada en la revista 'Woman's wear daily' dio mucho que hablar. Identificándolo con el Condor Nightclub de San Francisco, el monokini relegaba a un segundo plano el escándalo de los bikinis y de los posteriores trikinis.
Famosas más arriesgadas
Algunas de las actrices más reconocidas del panorama televisivo -o las celebs más internacionales- se atreven a lucir este arriesgado complemento de verano. Han conseguido traer a la actualidad del siglo XXI el icono de moda y sensualidad de los años 60 y adaptarlo a las nuevas tendencias.
Aunque algunas de ellas se han llegado a exceder en el significado de lo que representa el monokini -como Amber Rose y su casi inexistente traje de baño -, son muchas las que han querido hacerse con un modelito de esta nueva tendencia para ir a la última este verano.
Otras como Laverne Cox, compañera de reparto de Rose en la serie de HBO 'Orange is the new black', posaba en la playa con su arriesgado monokini negro y con tiras. La cantante JLo se atrevió a posar ante la cámara con un modelo más sencillo que las anteriores en color granate oscuro y con cuello en V. O también Miley Cyrus en versión negra y con dos tiras verticales para tapar el pecho desde el cuello.