Es considerado como uno de los tejidos con más tradición dentro del mundo de la moda, ya que hay escritos y gravados en los que se certifica su fabricación en China por el 3000 a.C. Siendo una de las materias textiles más codiciadas de la moda, esta ha sido vestida siempre por Reyes, Emperadores, nobles y grandes burgueses porque su estética es de todo menos discreta.
Características de la seda
La seda es uno de los materiales más codiciados del mercado, tanto de la moda como de cualquier otra industria que combine sus aplicaciones textiles, como en la decoración del hogar. Lo más característico de este tejido es su brillo y la suavidad de sus fibras, que ningún otro acabado consigue.
Pese a que su extracción se realiza de manera totalmente natural -ya que proviene de la segregación de sustancias de algunos insectos como la araña o las larvas de animales en proceso de metamorfosis-, la principal fuente de su recolección son los gusanos de seda. Actualmente, las fábricas más importantes y las granjas de estos diminutos seres se encuentran en China, situadas siempre en poblaciones donde se conserva el mejor ambiente para el desarrollo de estos seres. El problema con este material es que se necesitan cantidades grandes de la seda formada para el proceso de metamorfosis de las larvas de gusano, por lo que la población en estos espacios es muy grande.
Por otro lado, una de las principales fuentes de críticas para el tejido más valorado del mundo de la moda es su extracción, ya que se hierven los capullos que han realizado los gusanos antes de que estos completen su proceso de cambio.
La seda para él
Lo más común en la ropa de un hombre es encontrar camisas básicas y, al menos, un traje. En el caso de las primeras, la seda puede ser un poco más complicada de lucir porque no siempre se acierta con el color escogido. Aunque, en el caso del segundo, este puede resultar todo un acierto de estilo.
Para los trajes, puedes arriesgarte con la combinación de colorido imposible o poco recurrente. En acabados negros y plateados serán los reyes del día y la noche en todos los looks, aunque mejor si estos se reservan para una ocasión más especial y no para ir a trabajar, que resultará más cómodo si se hace en un dos piezas de algodón básico. En ese caso, siendo un traje normal de diario, la camisa de seda negra o blanca puede dar el toque que falta en un estilismo muy sencillo.
En hombre las prendas de seda más común son las camisas | Foto: ZaraEn cambio, sí que se puede acudir al puesto de trabajo con un pañuelo en el bolsillo de seda, pero que sea liso y sin muchos estampados, para que la intensidad misma del brillo de la tela llame la atención, pero sin que resulte estridente. El color no importa. Las corbatas también se suman a la tendencia de la seda, aunque a estas sí que se les puede dar un toque más original con estampados llamativos y de colores, pero sin que sean chillones o demasiado vitaminados.
Finalmente, cabe destacar la ropa interior para él, ya que la lencería masculina no tiene por qué reservarse solo para las noches de cama más especiales, sino que se puede ir igual de sugerente a lo largo del día. Las prendas de seda resultan suaves y muy cómodas por lo que parecerá que no se lleva nada.
La seda para ella
La ropa de mujer siempre ha tenido mayor variedad y muchas más posibilidades de combinaciones. Aunque la seda es un material que puede resultar un tanto difícil de combinar si no se hace adecuadamente y con los colores pertinentes.
En mujer las camisas pueden ser prendas más de diario | Foto: ZARAEn lo que respecta a los pantalones, mejor que estos sean de corte chino o con una línea culotte con estampados y coloridos, para que tengan una temática más asiática y que le dé un toque extra de estilo natural. Se pueden combinar con piezas ajustadas en el torso y lisas, que no llamen mucho la atención para que así los pantalones sean los verdaderos protagonistas del look. Para los pies, unas sandalias de tacón fino o unas bailarinas muy sencillas y discretas.
En el caso de las blusas, mejor si se decantan entre las de manga corta o sin mangas y siempre con colores lisos para que destaque el brillo de la propia tela. Si llevan detalles de volantes o lazadas por la zona del cuello el movimiento de la prenda será más natural, al igual que resultará con una caída más llamativa. Combínalas con unos pantalones lisos y mate, para que el efecto de ambas telas no resulte demasiado estridente. Además, es mejor si este sigue la temática de la blusa en cuanto a tonalidad, es decir: pastel y blancos, negros y oscuros; porque el brillo distintivo lo aplicará por sí sola la blusa.
Por otro lado, en las piezas que son más para eventos especiales, los vestidos no importa que sean largos de gala o cortos de coctel, ya que ambos patrones son los que tienen la clave del éxito en cuanto a vestidos de seda se refiere. Es mejor reservar cualquiera de los dos para eventos específicos.
Los vestidos son prendas formales | Foto: ZARAColores claros u oscuros, lisos o estampados, con detalles engarzados o con tules transparentes, cualquier combinación es plausible mientras la prenda sea elegante. Apuesta por los escotes en la espalda y los tirantes cruzados, que simularán un estilo propio de los años 60, pero no el de la etapa hippie sino el de las clases más altas de la sociedad adinerada.
Finalmente, cabe destacar la esencia misma de los monos de fiesta. Apuesta mejor por los que son amplios y cuentan con un corte abierto por la espalda, así como unos brazos libres de tela, que son los grandes triunfadores de esta categoría. Atrévete con los colores más oscuros para esta ocasión y aderézalo con unas joyas brillantes pero muy discretas. Los que cuentan con perneras amplias y la cintura remarcada serán los que mejor sienten a todo tipo de cuerpos. Con un clutch y unos salones finos, estarás preparada para vivir la mejor noche del año.
