Gorra marinera: guía de estilo

Los tocados siempre han sido el detalle más importante a la hora de cerrar un look por completo. Y, además, muchas veces se han llegado a convertir en una de las tendencias de moda que más carácter te puede aportar. Para ello, no debes perderle la pista a la gorra marinera, el último hito en las colecciones de las marcas low cost más conocidas, así como de las firmas más exclusivas del momento.

La inspiración Gaultier

Todo aquel que se considere un fiel seguidor de la firma del francés Jean Paul Gaultier sabrá que este accesorio no es del todo indiferente. Gracias a sus famosas camisetas de rayas y su estética más marinera, el diseñador siempre ha intentado aportar ese toque de humor pícaro y un llamamiento a la provocación a través de estas tendencias de moda.

Los accesorios son un detalle muy importante para concluir tu look

Por eso mismo, la gorra marinera se convierte en un imprescindible para entender este tipo de estéticas tan atrevidas. Aunque también existen otras vertientes de moda más relajadas y con un carácter mucho más relajado para el día a día, dentro de lo que este tipo de accesorios pueden dejar como 'casual' en los estilismos habituales.

Siempre teniendo como punto de referencia la parte de las tendencias parisinas, esas en las que el glamour del menos es más y la estética más relajada y sencilla, la gorra marinera puede adaptarse mucho mejor que bien para aportar ese toque distintivo que haga destacar tu estilismo. Para ello, no hay nada mejor que acompañar a este accesorio de unos labios rojos y mucho chic francés.

El hábitat de la gorra

La gorra marinera es una de las últimas tendencias más de moda del momento, pero no cualquier estética vale con ella. Para eso, además de tener mucho carácter a la hora de saber combinar piezas de distintos estilos y ser más atrevida en los looks de calles con estilismos más arriesgados, hay que tener en cuenta que no es aceptada en cualquier tipo de ocasión.

La gorra marinera no es adaptable a cualquier tipo de ocasión

Al igual que ocurre con los sombreros o las pamelas, los primeros mejor si son con toques más folk para un día libre por la gran ciudad y los segundos para una tarde de playa o para acudir a algún acontecimiento más formal al aire libre, las gorras marineras tienen su propio hábitat. En este caso, el accesorio del momento es para una persona con un carácter más seguro de sí mismo y que sepa llevar las últimas tendencias de moda de una manera muy espontánea y casual.

Por otro lado, pese a estar muy emparentadas con las gorras de béisbol típicas -que han retornado esta última temporada con un estilo más femenino y en distintos acabados, colores y materiales de lujo-, su uso todavía no está muy unido. Mientras que estas últimas se reservan para un look de calle con una clara inspiración deportiva y muy relajada, la gorra marinera requiere de ese glamour y estilo que profesan las 'rues' de París más exclusivas.

Como llevar el pelo

Tanto el pelo largo como el corto encuentran en la gorra marinera un aliado perfecto de estilo de moda. No hace falta recurrir a las tendencias del momento en peluquería para que esta quede mejor, sino que podemos darle unos simples toques a nuestro cabello para que termine de casar a la perfección con el tocado escogido.

Tanto el pelo largo como el pelo largo quedan bien con las gorras marineras

En principio, el pelo corto se puede peinar con las puntas hacia afuera, para que, a la hora de ponernos la gorra, este haga un efecto de volumen y no parezca que este accesorio nos aplasta el cuero cabelludo. Además, el pelo largo y listo, peinado siempre hacia atrás para dejar el rostro despejado, dará un toque más natural y sofisticado.

En ambos casos, la gorra marinera solo hará que mejorar el aspecto. Aun así, el maquillaje debe ser muy natural, sin demasiados efectos ni colores, para que no se recargue la parte más alta del cuerpo. Con un poco de máscaras y rizador de pestañas, unos toques de rubor y unos labios nude o rojos, el conjunto al completo quedará espectacular.

Combinaciones posibles

La moda determina que hay una serie de normas a seguir cuando una prenda en concreto se convierte en una de las mayores tendencias. Así que, en este caso con la gorra marinera, no podía ser menos. Eso sí, esta puede tener un toque de inspiración más moderna y no tan anclada en su estética en alta mar. Aunque tampoco hace falta innovar del todo con ella, ya que la forma es de por sí llamativa y, cuanto menos, favorecedora.

Los labios de color rojo se ajustan perfectamente a la gorra marinera

Para asegurarte una buena posición en el mundo de la moda, si quieres incluir este accesorio en tu armario particular, asegúrate de tener ese carácter fashionista, ya que este es el primer gran requisito para poder saber lucir una gorra marinera con destreza. Después de esto, solo te harán falta un par de prendas clave con las que empezar a combinar tus looks.

En primer lugar, apuesta por las rayas. Por muy típico que sea, esta combinación siempre es perfecta ya que conjunta las dos claves de alta mar. Por eso, es importante tener en mente la estética que decíamos del diseñador Jean Paul Gaultier, ya que añade piezas anchas para las piernas como unos pantalones palazo y ajustadas sobre el pecho en formato body.

Además, a esta sugerencia de estilo, puedes añadirle un toque más chic al decantarte por dos extremos: cuellos barco en el que se destaque la forma de tu clavícula -sobre todo para quien tiene poco pecho, ya que estiliza mucho la figura- o jerséis muy finos de cuello -sin necesidad de ser un cuello muy alto, si no a media altura para dar la sensación de que esta parte del cuerpo es más larga-. Pon el punto final en unas botas de tacón no muy altas o en clave botín.

Busca looks ajustados para que resalte tu gorra marinera

Por otro lado, también puedes asegurarte un look de moda muy sofisticado y parisino si le añades unos pantalones ajustados y dejas que el protagonismo se centre en un pañuelo fino anudado al cuello y la propia gorra marinera. Si nos encasillamos en este tipo de estética, el acierto en el conjunto será perfecto siempre. Sin necesidad de arriesgar, porque ya sabemos lo que funciona.