Si algo hizo que la marca Jacquemus se convirtiese en lo que es hoy en día -una de las firmas mas mainstream y deseadas del momento- fueron sus bolsos. El diseñador francés homónimo a la marca fue de los primeros en convertir diminutos bolsos en el complemento de moda. Por su culpa, miles de personas solo podían salir con sus tarjetas de crédito, un labial y las llaves de casa metidas en él y el móvil todo el tiempo en la mano. Y de ahí, todos los demás.
Junto con sus looks románticos que rezuman a francés de la riviera -como el propio Jacquemus-, los bolsos han sido el objeto de deseo de la firma desde entonces. Ya no solo tenían que ser pequeños, ahora basta con que sean Jacquemus y lleve la firma. Sus formas geométricas y coloridas a veces acompañadas de tejidos teddy hacen que miles de it-girls en todo el mundo quieran colocarse bajo el brazo uno de sus diseños. Pero claro, estos no están al alcance de cualquiera.
Pero no hay nada como virarlizarse para que algo acabe llegando, de una forma u otra, a todos. Y en eso tiene un papel fundamental el fast fashion. Mientras que las grandes marcas sacan a la venta sus colecciones cada comienzo de la temporada y tras haberla presentado 6 meses atrás, las marcas más accesibles a grandes públicos se pueden permitir una producción mucho más rápida sacando todo tipo de productos nuevos cada semana.
Por ello no es de extrañar encontrar en firmas muy conocidas prendas sospechosamente muy parecidos a los de alguna otra marca de moda de lujo. Una simbiosis entre lujo y moda rápida que se ha establecido con el paso del tiempo porque lo que acaba ocurriendo es que todo el mundo quiera ponerse, como este caso, un Jacquemus. Algunos se lo comprarán en Jacquemus, porque pueden o se han querido dar el capricho; otros tendrán que conformarse con imitados disimuladas en fast fashion, pero todos, todos, todos lo llevan porque quieren un Jacquemus.
La versión low cost del Bambino Long
Por ello Mango acaba de regalar al mundo la versión low cost del conocido Bambino Long. Así a grandes rasgos, ambos bolsos son muy parecidos por estructura, rigidez y sobre todo colorido, aunque el de Mango tiene una forma más de cuadrado trapezoide y del que toma su nombre 'geométrico'. Pero así, a simple vista, rezuma 'vibes' de Jacquemus por todas partes.
¿Lo bueno? Que la versión low cost cuesta tan solo 22,99€ y está disponible en naranja, amarillo, rosa, blanco y negro; mientras que en Jacquemus su precio es de 715€.