El pasado mes de junio de 2019, la archiconocida Kim Kardashian anunciaba públicamente a través de su cuenta personal de Instagram un nuevo proyecto vinculado con el mundo de la moda: una línea de fajas reductoras para mujeres. Una firma que para sorpresa de la celebrity tuvo más repercusión de la esperada y no precisamente para bien. ¿La razón? La elección del nombre : Kimono. Un bautizo que trajo consigo un conflicto diplomático con Japón, quienes llegaron a acusar a la empresaria de apropiación cultural.
La polémica trascendió hasta tal punto que Kim Kardashian no tuvo más remedio que rectificar y anunciar un cambio de rumbo y nombre. Sin embargo, y tras dos meses de letargo, Kim Kardashian acaba de anunciar el nombre definitivo. De nuevo, y como es habitual entre las influencers, ha sido a través de su cuenta de Instagram donde ha publicado y bautizado su firma de lencería: Skims. Una decisión en la que la legión de seguidores que atesora a sus espaldas ha tenido mucho que ver.
UN SEGUNDO INTENTO MEJOR RECIBIDO
Por otro lado, Kim Kardashian agregó : "Me encanta la idea de que las piezas sean lo más parecido a la piel de una persona, adaptándose con telas increíblemente suaves y que acentúan las mejores partes de nuestros cuerpos". Skims Solutionwear estará disponible en tallas XXS a 5XL, y las nuevas imágenes de campaña presentan una amplia gama de mujeres vestidas con ropa interior y lencería confeccionada en color nude, que parecen tener el mismo aspecto que cuando fueron lanzados bajo el nombre, Kimono. Sin duda, Kim Kardashian ha hecho lo correcto al renombrar su línea, especialmente dada su intención con este proyecto de crear fajas que se adapten a mujeres de todas las formas, tamaños y colores. No hay duda de que 'Skims Solutionwear' será un éxito, y es de esperar que la empresaria haya aprendido una valiosa lección.