Innovador, elegante y polémico. ¿Quién es este diseñador capaz de relanzar dos gigantes de la moda como Gucci e Yves Saint Laurent y crear su propia marca?
Tom Ford nació en Austin, Tejas, en 1962 y siempre mostró gran interés por el arte y el diseño de interiores. Desde muy pequeño, sus padres lo animaron a desarrollar sus inquietudes artísticas, lo cual, posteriormente, tendría gran influencia en sus diseños porque, en palabras del propio Ford: "las imágenes de belleza que captas en la infancia, permanecen contigo durante toda la vida".
Dos miembros de su familia fueron sus primeros referentes de moda. Su madre, chic y clásica, le enseñó que vestir mal era irrespetuoso hacia las otras personas. Este concepto hizo que el diseñador siempre se preocupara por su aspecto y, a los doce años, ya tenía su primer par de mocasines Gucci. Su abuela paterna, por el contrario, era "estilosa de una manera muy tejana: todo grande y llamativo". Posteriormente, el diseñador combinaría estos dos estilos para conducir a Gucci a su época dorada.En 1979, Tom Ford inició sus estudios de Historia del Arte en la Universidad de Nueva York, ciudad en la que descubrió el mítico Club Studio 54 y donde conoció al artista pop Andy Warhol. Poco después, Ford abandona la universidad y, durante todo el año, asiste a fiestas y aparece como modelo en diferentes anuncios de televisión.
Algún tiempo más tarde, se matricula en la Parsons School of Design de Nueva York para estudiar arquitectura y diseño de interiores. Más tarde se traslada a la Parsons School de París para continuar sus estudios pero, al final del curso, descubre su verdadera vocación: la moda. Por ello, tras graduarse, regresa a Nueva York para empezar su formación.
Primeros pasos en la moda
Cathy Hardwick, famosa diseñadora americana de ropa deportiva, fue su punto de partida. Dos años más tarde, Ford ocupa el puesto de Director de Diseño para Perry Ellis, por debajo de Marc Jacobs. Sin embargo, su objetivo era Europa por lo que se traslada a Francia, donde estudia a fondo el mundo de la pasarela para, finalmente, dirigirse a Milán y unirse al equipo de Gucci.
El resurgir de Gucci
El primer puesto de Tom Ford dentro de Gucci fue como diseñador de la línea de ropa femenina. En 1992 ocupa el puesto de Director de Diseño y, dos años después, es nombrado Director Creativo, quedando a su cargo tanto el diseño de la ropa como la concepción de todas las líneas de producto dentro de la compañía, además de su imagen y la de las tiendas Gucci.
Desde su llegada a la casa, el diseñador fue rompiendo sistemáticamente todas las normas tanto de imagen como de comunicación y, temporada tras temporada, fue devolviendole el glamour a través de innovadores diseños como pantalones de estilo Halston en terciopelo, finas camisas de raso y botas de acabado metálico.
En 1995, Tom Ford contrató a la estilista francesa Corine Roitfeld y al fotógrafo Mario Testino para la creación de una serie de campañas publicitarias sexys y modernas protagonizadas por la modelo Amber Valletta. Su tercera colección, un año más tarde, supone ya el triunfo absoluto del diseñador: es el momento de los vestidos Tom Ford, vestidos blancos que resaltan la figura femenina, sinuosos, con troquelados en forma de "G". Asimismo, rescata el aire hippie bajando el talle del pantalón a la cadera y ensanchando la pata. Grandes escotes en camisas de seda, chaquetas cortas y entalladas, grandes solapas, faldas lápiz y sexys stiletos. Todo ello para una mujer explosiva, poderosa y segura de sí misma.
Además de las colecciones femeninas, Ford presentó líneas masculinas, deportivas para hombre y mujer, de trajes de noche y mobiliario para el hogar. En 1992, Gucci había pasado de estar prácticamente en la bancarrota a valer 4.3 billones de dólares aproximadamente y a ser la marca elegida por celebridades de la talla de Madonna, Sharon Stone, Gwyneth Paltrow o Uma Thurman. En cuanto a la línea masculina, Tom Cruise fue uno de sus primeros embajadores.
En el año 2000, Gucci se hace con el control de la marca francesa Yves Saint Laurent y Tom Ford es nombrado Director Creativo y Director de Comunicaciones, funciones que ha de compatibilizar con sus responsabilidades en Gucci. A pesar del gran desafío que supone trabajar para las dos casas, el diseñador consigue mantener las colecciones independientes.
Vuelven a aparecer los vestidos Tom Ford con volúmenes, volantes y pronunciados escotes, así como el esmoquin, icono de la marca. Esta colección le valió el premio al Mejor Diseñador Internacional en los primeros Premios VH1/Vogue, en Nueva York, el primero de muchos reconocimientos. En 2004, el grupo Pinault Printemps Redoute adquiere Gucci, pero las desavenencias del diseñador con los nuevos propietarios respecto a su contrato, hacen que Tom Ford anuncie su salida de la casa.
Un nuevo proyecto
Tras la salida de Gucci, una de sus primeras actividades es ejercer como consejero de la casa de subastas Sotheby's en París. También colabora con el imperio de la cosmética Estée Lauder y presenta un libro sobre su trabajo en Gucci e YSL. En 2004 anuncia la creación de la marca Tom Ford y, en 2006, lanza Black Orchid, su primer perfume.
Y, por fin, en 2007, abre su primera boutique en Madison Avenue, donde presenta su colección prêt-a-porter para hombre. En 2010 retorna al diseño femenino en un desfile protagonizado por figuras tanto del espectáculo como de la pasarela. Julianne Moore, Rita Wilson, Beyoncé, Lauren Hutton, Karen Elson, Stella Tennant o Amber Valletta presentan unos diseños con cierto aire masculino, lujo, sensualidad y toques de los setenta y los ochenta. Su participación en el desfile de la Semana de la Moda de Londres supone la vuelta definitiva a las pasarelas.Sus últimas creaciones para la temporada otoño/invierno 2014 muestran sus nuevas propuestas a través de cazadoras, faldas de cuero de vaca con lentejuelas y los clásicos vestidos Tom Ford para la noche mostrando mucha piel. En cuanto a los complementos, sus diseños muestran bolsos para eventos especiales o cruzados al cuerpo. Estilo moderno y elegante elaborados con diferentes pieles, como la de visón. Glamurosas gafas de sol con montura de colores y materiales muy diferentes en los que los detalles son minuciosamente cuidados, cosméticos, perfumes, todo ello compone el particular universo Tom Ford, al que el mundo del cine y la música también ha tenido acceso.
Uno de sus últimos trabajos ha sido la elaboración del vestuario del agente 007 Daniel Craig para Quantum of Solace, 420 prendas en tonos que van desde el negro al azul marino. Más recientemente, en este mismo año, ha vestido al cantante y actor Justin Timberlake en su gira mundial, diseñando un vestuario compuesto de 8 looks y un total de 600 piezas para todo su equipo de músicos, bailarines y coristas.
El diseñador también triunfa en la alfombra roja ya sea en las galas de los premios MET, Globos de Oro, premios BAFTA y, por supuesto, los Oscar. Actrices como Julianne Moore o Gwyneth Paltrow brillaron con vestidos Tom Ford en las últimas galas mientras que Colin Firth, Tom Brady o Nick Hoult destacaron por la elegancia y cierta rebeldía de sus tuxedos.
El director Tom Ford
Pero la relación del diseñador con el cine no se limita al diseño de vestuario o a la alfombra roja. Desde su juventud, la interpretación y la dirección habían ejercido una fuerte atracción sobre él y así, en 2010, Tom Ford funda la productora Fade to Black. 'A Single Man', protagonizada por Colin Firth y Julianne Moore, es la película con la que debuta en la dirección cinematográfica, obteniendo diferentes premios y nominaciones, entre ellas a los Globos de Oro y a los Oscar.
Y es que Tom Ford es un hombre polifacético, fundamental para entender la moda y la estética de los últimos años. Polémico, no duda en recurrir a la sexualidad para la promoción de sus diseños. Su estilo, con reminiscencias de los años 70 y 80, y su capacidad para incorporar nuevos tejidos como el strech o el satén en trajes masculinos, combina gran sensibilidad comercial y auténtico vanguardismo, mientras nos deja maravillosas imágenes de vestidos Tom Ford cargadas de sensualidad que nos transportan a los brillantes años del Club Estudio 54.