Aunque generalmente se cree que los hombres lo tienen más fácil que las mujeres a la hora de vestirse para ir a eventos familiares o importantes, puede que la cosa se complique si no se conoce el dress code correcto para la ocasión, los colores que se tienen que elegir o el tipo de prenda que se debería utilizar en cada momento. Es durante la primavera, especialmente los meses de mayo o junio, cuando cada año se repite uno de los acontecimientos clave entre las celebraciones familiares, como así son las tradicionales comuniones. En Bekia Moda te contamos la guía masculina perfecta para que no falles con tu look en este día tan importante para toda la familia y no dudes a la hora de responder la famosa pregunta del 'qué me pongo'.
Cómo vestir para ir a una comunión si eres un hombre
Colores pastel, acierto asegurado
Uno de los errores más comunes que cometen muchos hombres a la hora de vestirse para la Comunión del pequeño de la familia es optar por colores oscuros. La regla de oro para acertar con el look en este tipo de acontecimientos es evitar enlutarse, ya que es un evento alegre y que se desarrolla en plena primavera, por lo que la mejor opción es recurrir a los tonos claros y pastel, que transmiten cercanía, alegría y van en consonancia con el buen tiempo. Sin embargo, no hay que olvidar la excepción del azul marino que confirma la regla. Este color no implica oscuridad, así que está permitido y no se tiene que prescindir de él en este tipo de eventos.
La paleta de los colores pastel es bastante variada, lo que permite realizar una diversa y correcta combinación de los mismos, mucho más de lo que comúnmente se piensa. Beige, azules claros o celestes, o blanco son los must de esta gama cromática para el caso de los hombres, que pueden ser enfatizados con ese azul navy del que os hablábamos antes para darle más fuerza al look.
El traje, la opción clásica que no falla
Bodas, bautizos y comuniones componen las siglas de BBC. En todas estas celebraciones el traje es una de las opciones más clásicas y recurrentes para los hombres, un acierto asegurado con el que también hay que tener cierto cuidado, puesto que no todo vale. Continuando con la lista de reglas de oro para no fallar, hay que obviar las sobriedades, los trajes invernales de lana y los zapatos negros de noche, ya que no se debe olvidar que este es un evento de día.
Empezando por la chaqueta, recta es la opción preferida. En cuanto a los botones, lo mejor es que sean americanas con dos, siempre desabrochado el de abajo. Por su parte, el largo del pantalón es otra de las claves, ya que muchos hombres, jóvenes sobre todo, tienden a olvidar que están acudiendo a un evento de etiqueta semiformal, por lo que no se pueden llevar pesqueros y enseñando los tobillos, pero tampoco con un largo excesivo, debiendo ser algo intermedio que no se monte demasiado sobre el zapato.
El traje azul marino es perfecto, pudiendo combinarse con un zapato oxford marrón, camisa blanca y corbata de rayas en tonos azulados, aunque hay muchas más combinaciones, como también podría ser una camisa ojo de perdiz azul celeste y una corbata lisa granate. La pajarita podría ser la gran rival de la corbata, pero mejor reservarla para otro tipo de fiestas. Se opte por la combinación que se opte, el sastre será siempre la opción clásica con la que no fallarás en la Comunión. Sin embargo, y como suele decirse, lo poco gusta y lo mucho cansa, por lo que un pañuelo en el bolsillo de la chaqueta o unos tirantes son excesivos para este tipo de evento y son complementos que deben quedar guardados en el armario.
Dos piezas, la opción más casual
Al ser un evento que no roza la formalidad de una boda, también se puede optar por un outfit más casual o de sport, formado por un dos piezas en los que el color de la chaqueta y el pantalón es diferente. Es una opción muy primaveral y que está permitida en este tipo de acontecimientos, además de dar mucho más juego que el traje. La opción tradicional es el chino beige, con camisa azul cielo lisa o de rayas y americana navy. A pesar de ello, hay muchas más que puedes valorar, ya que se trata de un look más relajado que el traje y que da más juego.
Para los más valientes y arriesgados, se puede optar por un pantalón amarillo pastel, camisa blanca y americana azul marino. Sin embargo, dejando combinaciones a un lado, uno de los básicos del look dos piezas es calzar unos zapatos náuticos o unos mocasines de ante. El tradicional zapato de piel es preferible reservarlo para el traje, que tiene un toque más formal que este outfit.
Evita fallos siguiendo una serie de consejos
Algunos tips imprescindibles que deberías seguir para evitar errores en tu look van mucho más allá de lo que ya hemos comentado sobre los conjuntos excesivamente serios y oscuros. Otro de los aspectos fundamentales es no olvidar en ningún caso la chaqueta o americana en casa, ya que estamos hablando de una ceremonia religiosa que requiere una etiqueta concreta, por lo que, como mínimo, para el momento de la iglesia se tendrá que llevar esta prenda en todo momento.
Los estampados también tienen que quedarse en el vestidor el día de una Comunión. Se puede optar por algunos muy sencillos, como la pata de gallo o el ojo de perdiz, pero no pasar de ellos porque puede que jueguen en nuestra contra. Se puede conseguir un look fresco sin necesidad de recurrir a telas demasiado llamativas.
Dentro de los consejos que te damos para no cometer errores también se encuentra el de dejar las gafas de sol guardadas en su estuche. Es cierto que en primavera el sol puede ser realmente cegador, pero para las fotos que suelen hacerse en días como el de una Comunión queda feo y poco elegante salir con ellas. A menos que seas fotosensible, que entonces estaría más que perdonado, tendrás que aplicar el dicho de "para lucir hay que sufrir" con el caso de las gafas de sol.