Los atuendos de gala masculinos son, en muchas ocasiones, algo más limitados que los femeninos. Muchas son las reglas protocolarias que reúnen unos requisitos determinados para la forma de vestir de los hombres en un evento concreto. Y es que al igual que los atuendos para mujeres, los hombres tienen un atuendo determinado para cada tipo de acontecimiento, todo depende además del horario y el tiempo atmosférico en el que se desarrolle el evento.
A pesar de que en la actualidad, los hombres han adoptado un estilo que combina lo formal con lo informal, pues en las últimas temporadas el pantalón de traje combinado con una americana se ha vuelto una opción que ha cautivado a la mayoría del género, sobre todo, a los hombres más jóvenes. Aún así, existen eventos en los que se debe tener más en cuenta la forma de vestir y más ahora que llegan las cenas de Navidad o fiestas de noche atemporales.
El esmoquin es esencial para ciertas ocasionesQué es el esmoquin
La forma de vestir y la imagen de una persona se han transformado en un portfolio sobre la personalidad de esta. En cuanto a los hombres, los atuendos por los que se decanten pueden hablar de una forma u otra según el contexto en el que se encuentren. Por ejemplo, un hombre que elija como atuendo diario un traje es porque su rutina exige este tipo de vestimenta, además suelen ser personas que a la hora de asistir a un evento cuidan también su imagen eligiendo indumentaria más clásica.
Entre los atuendos clásicos para vestir de la ropa masculina se encuentra el legendario esmoquin. Este tipo de traje se corresponde con una vestimenta de etiqueta masculina para lucir en fiestas que tengan lugar de noche, como por ejemplo cenas, cócteles o una entrega de premios. Es importante que la categoría del esmoquin no se confunda con la de un chaqué o frac, siendo estas dos opciones más propias de una ceremonia más importante como una cena de gala o una boda.
La historia de este traje de etiqueta reside en la moda del siglo XX, también conocido entre los ingleses como tuxedo, es un atuendo masculino que se le reconoce como una vestimenta para cenar. Aunque también es cierto que este traje es además conocido en la moda y en la vida en general por uno de los personajes de la ficción más elegantes y atrevidos, el agente 007 James Bond.
Es conocido porque lo utilizaba James BondY es que el esmoquin se ha convertido con los años en la vestimenta por excelencia de los hombres con citas eventuales importantes. Elegancia, sofisticación y una apariencia meticulosa, estos pueden ser algunos de los rasgos que define a la persona que porta un esmoquin, pues más importante que el quién está el cómo lo lleva.
Cómo lucir el esmoquin
El momento en el que un hombre se decide a llevar a esmoquin a un evento es principalmente porque es un requisito de indumentaria, reconocido en la industria de la moda y el protocolo como 'dress code'. Este pequeño, aunque muy importante detalle, viene señalizado en la mayoría de las ocasiones en la invitación que mandan a los asistentes del evento. Si la cita requiere de una vestimenta de etiqueta pero no es de una categoría de ceremonia más formal, en la invitación vendrá señalizado como un dress code: Black Tie. Esto quiere decir que los demás asistentes varones irán o deben asistir con esmoquin.
¿Cómo elegir un esmoquin? El secreto de la indumentaria de etiqueta reside en la calidad, siendo este atuendo uno de los claros ejemplo que demuestra que hay que detenerse a valorar los detalles de la confección. A pesar de que los hombres puedan estar acostumbrados a llevar en su vida diaria un traje por motivos de trabajo, es cierto que en su tiempo de ocio no todos se siente cómodos estando bajo un atuendo también formal. Es por ello que es importante valorar la comodidad y la calidad frente a una apariencia, aunque esta es también primordial.
Este traje de etiqueta está elaborado a través de tela de lana fina para conseguir un acabado estéticamente aceptado por el protocolo. En un evento en el que se pide como requisito un esmoquin es importante que los caballeros tengan en cuenta que es primordial no quitarse la chaqueta, aunque el anfitrión de la fiesta lo haga, esto estaría fuera de las reglas del protocolo que los invitados lo hagan.
Además junto a esta regla de oro, es primordial que el único botón de la chaqueta quede también abrochado en todo momento, por no hablar de su especial cuidado en el tallaje. Al igual que pasa en el caso femenino, una prenda de etiqueta que no se ajusta de forma correcta, ni más ni menos, a la figura del portante se verá con un resultado antiestético y muy poco protocolario. En la misma línea sigue el largo, es decir, el tamaño de las mangas y el largo del pantalón es importante que esté confeccionado casi al milímetro de quién lucirá. Es por ello que las prendas de etiqueta se caracterizan por ser en la mayoría de las ocasiones como un atuendo muy personal.
El botón de la chaqueta debe ir abrochado en todo momentoDetalles del esmoquin
En una indumentaria de etiqueta todos los detalles deben ser cuidados, sino el resultado no será tan favorecedor como se esperaba. Entre los puntos que se tienen que tener en cuenta son los complementos, y es que el esmoquin siempre, siempre va con pajarita, nunca con corbata. Así lo testa las reglas del protocolo, esmoquin con pajarita siendo esta de color neutro y, en la mayoría de las ocasiones, a juego con el resto del traje. Los colores más comunes con el negro, el azul marino y el blanco, aunque este último se suele combinar con una pajarita en color negro.
Otro complemento que añade elegancia son los llamados gemelos. Casi por protocolo histórico, los gemelos son un punto referencial en el esmoquin en el que nunca se debe fallar. Por ello, la camisa debe poseer puños dobles para poder lucir este tipo de complementos.
