La temporada otoño/invierno 2016/2017 se avecina muy psicodélica y colorida de la mano del diseñador psicodélico Issey Miyake. Una apuesta arriesgada y atrevida que se posiciona como una de las más divertidas y optimistas de toda la jornada en la semana de la moda masculina de París. El escenario elegido se alzaba blanco y regio, con apenas una pequeña decoración con una plantación de trigo sobre un lado, todo lo necesario para no restar importancia ni protagonismo a la estética animada y distendida -tanto de la colección, como del propio diseñador-.
Gran colorido
Los colores neutros como el negro, el gris y el marsala se posicionan como los básicos imprescindibles en los total looks que se presentan ante la temporada. Pero los verdaderos protagonistas son sin duda los tonos más fuertes: azul eléctrico, amarillo chillón, turquesa fosforescente, mezcla de tonalidades naranjas y rojos potentes... Ya sea en piezas sueltas o incluso en trajes sastre, incluyendo el estampado sobre todo el conjunto.
Cambio de rol
Las piezas reconocidas como femeninas para el 'street stile' buscan la perfecta armonía con la línea masculina: el mono largo en tejidos finos y delicados. Estampados hiper coloridos, con efecto psicodélico, detalles en print animal azul, con detalles metalizados, en colores brillantes, superposición de tejidos o efecto 'degradée' son las causantes de los efectos visuales y cromáticos que crean las piezas de la colección otoño/invierno de Issey Miyake.
Estética moderna
Las cazadoras, los abrigos, los jerséis, las camisas estilo kimono o las americanas, nada queda fuera de alcance de la locura y fantasía del diseñador japonés, donde desahoga toda su pasión por la moda con grandes apuestas arriesgadas. Así como los sombreros de estilo campesino -una clara referencia a la economía tradicional de Japón- y los bolsos de mano en clave masculina que tanto éxito están teniendo este año.
La estética moderna de una colección que se basa en las claves de estilo de la tradición japonesa. Una línea masculina que recuerda sin duda a la época de mediados del siglo XX, sobre la clase trabajadora y campesina de entonces. Una combinación de épocas, estilos, culturas y pensamiento que se posicionan como una de las colecciones más sorprendentes de la semana de la moda de París.