El esmoquin es una prenda de ropa que desde que comenzó a llevarse ha sido tanto odiada como adorada por los hombres. Pero al final, de mejor o peor manera, casi todo hombre tiene que lucir esmoquin algún día de su vida. Siempre que un evento exija dress code de Black Tie un hombre sí o sí tendrá que vestir un esmoquin. También existe la posibilidad de que ponga 'Black Tie Preferred' que significa que si se tiene un esmoquin lo mejor es llevarlo pero que si no vale también con un traje negro.
Esta prenda es difícil lucirla con estilo y no parecer el camarero de la fiesta. Por eso hay algunos trucos que es mejor llevar a cabo para salir airoso de una prenda tan compleja.
El tamaño
Es lo primero a tener en cuenta. En muchas ocasiones los hombres deciden no comprarse el esmoquin debido a que piensan que no lo van a utilizar asiduamente y esta prenda es bastante cara. Por ello una solución útil y sencilla es alquilarlo. Sin embargo cuando esto ocurre se suele cometer un error y es el tamaño. El esmoquin está pensado para que se lleve ajustado a la perfección y es muy difícil que un esmoquin alquilado quede de tal manera.
Por ello si se ha decidido alquilar un esmoquin hay que tener en cuenta este detalle y si es necesario hacer que te lo arreglen un poco a la medida. El tamaño perfecto de esta prenda consiste en primer lugar en el bajo y ancho del pantalón. No debe sobrar tela que quede arrugada en el tobillo ni tampoco que quede tan corto que este se vea. Debe caer justo sobre el zapato. Sin embargo es mejor que sobre que que falte, ya que algunos defienden que debe hacer un pliegie, pero solo uno, antes de llegar al zapato. Además no debe quedar apretado ni tampoco demasiado ancho.
Con respecto a la chaqueta hay que mirar para empezar el largo de las mangas. Estas nunca deben sobrepasar las muñecas. Además debe verse un pequeño trozo de la camisa, alrededor de unos dos centímetros, para ello precisamente están los gemelos que si la chaqueta es del tamaño adecuado dejará que se vean. Con respecto al largo, debe quedar a la altura de la cadera.
¿Chaleco o fajín?
Ambos son aceptables aun así lo recomendable es llevar chaleco si tenemos una chaqueta que lleva las solapas de punta y fajín si las solapas son redondeadas. Aun así son diferencias específicas por lo que no ocurre nada si se cambian. El llevar alguna de estas prendas es uno de los puntos básicos que nos distinguirán de un camarero por ello hay que tenerlo en cuenta. Lo recomendable es que sea del mismo color que el esmoquin.
Si se opta por el fajín veremos nuestra figura algo más estilizada y disimulará esos kilos de más. Con respecto al chaleco este puede ser con botonadura simple o cruzada pero debe ir siempre abrochado. Sin embargo si nuestra chaqueta es cruzada el protocolo dice que no hay que llevar ninguna de estas prendas.
La pajarita
Esta prenda si que es obligatoria si se lleva esmoquin, aún que se prefiera una corbata. Lo ideal es que sea de seda y que además no venga ya anudada sino que lo haga uno mismo el que le hagas el nudo.
Otras telas que son comunes y aceptadas son la lana, el raso o el otomán. Al igual que con el esmoquin, es muy importante tener en cuenta el tamaño. Este debe ser proporcional al tamaño de las solapas de la chaqueta y al cuello de la camisa.
Los pequeños detalles
Es el apartado más importante ya que va a ser una forma de distinguirnos de aquellos que no luzcan con estilo el esmoquin.
Los zapatos
Para rematar el look no se puede olvidar de los zapatos. Estos tienen que ser negros, normalmente se utilizas los de cordones tipo Oxford de charol negro y sino también pueden ser de cuero. Lo mejor es evitar los mocasines normales de pala altar. Si se prefiere optar por usar mocasines los más recomendables son los de ante y bocado en la pala. También puedes optar por unos opera pumps. Estos son de charol y llevan un gran lazo en grosgrain.