Calzedonia es una de las tiendas más conocidas que existen en la actualidad de venta de ropa interior y de baño. Es prácticamente imposible no encontrar uno de sus establecimientos en un centro comercial o gran ciudad española. Nuestro país no es una excepción, sino que forma parte de la gran expansión internacional de la firma italiana.
Sus coloridos escaparates se han convertido en una de sus señas de identidad de la marca. En invierno es la lencería, las medias y los calcetines los que copan el protagonismo en sus expositores mientras que en la temporada estival son las prendas de baño las que tienen el privilegio de ocupar ese lugar destacado y de ser el reclamo para sus clientes.
Sus prendas se caracterizan por combinar diversión y estilismo, de tal manera que tanto pueden ser utilizadas para un momento informal como para un acontecimiento especial. Mítica es su amplia gama de colores y lo variados y variopintos diseños que se imponen en calcetines, medias y ropa interior. Lo mejor no es sólo el binomio calidad-precio, sino el hecho de que cuentan con propuestas para hombre, mujer y niños.
Cómo nació Calzedonia
La firma italiana cuenta con más de 20 años de historia a sus espaldas. Fue en 1987 en Verona (Italia) donde se puso en marcha esta marca. La idea inicial es la misma que mantiene en la actualidad: un negocio de venta de medias, calcetines y ropa de baño tanto para mujeres como hombres o niños. Poco a poco fueron vieron la posibilidad de ampliar su mercado, pero ya entonces tenían claro las posibilidades de crear toda una red internacional de tiendas a través de franquicias.
En unos años no sólo se convertiría en una exitosa red de franquicias, sino en todo un grupo textil que había diversificado su negocio en diferentes áreas; todas ellas relacionadas con la lencería y la moda de baño. Actualmente esta marca se encuentra presente en 30 países, principalmente de la Unión Europea, a través de 1.750 tiendas y más de 3.000 puntos de venta, dando trabajo a más de 25.000 personas.
Sandro Veronesi fue el creador de Calzedonia, quien tras varios trabajos en el mundo de la empresa textil puso en marcha la firma y apostó desde el primer momento por el modelo de franquicias. Actualmente forma parte de la lista de personas más ricas del mundo que elabora la revista Forbes, que cifraba su fortuna en 2013 en cercana a los dos mil millones de dólares.
A pesar del éxito alcanzado es una persona reservada de la que apenas hay información pública. Sí que existe, sin embargo, sobre los avances de su imperio de calcetines y ropa de baño. En los últimos años Veronesi se ha interesado también por la producción de vinos y los establecimientos hoteleros, todos estos negocios asentados en Italia.
El crecimiento del grupo
La firma de Veronesi alcanzó pronto el éxito gracias a la combinación de una buena calidad-precio en los productos que ofertaba. Además la red de franquicias la convirtió pronto en una marca internacional fácilmente reconocible para buena parte de sus potenciales clientes. Llegó entonces el momento de la diversificación y Calzedonia lo hizo diferenciando sus espacios de mercado en una determinada firma.
Intimissimi y Tezenis fueron las escogidas para centrarse en lencería, para todos los públicos. Ahí radica parte del éxito de la firma, en el hecho de que no diferencia por razones de sexo y edad, por lo que todos los miembros de la familia pueden comprar en uno de sus muchos establecimientos.
Menos conocida es Cash and Carry, otra de las filiales de Calzedonia, dedicada a la venta al por mayor de lencería y ropa de baño para toda la familia. Al igual que en el resto de marcas destaca el diseño, el color y los buenos precios de sus productos.
La última empresa en incorporarse al grupo Calzedonia fue Falconeri, que desde diciembre de 2013 pertenece enteramente a Veronesi. Se trata de una firma que produce piezas de punto y cashmere para hombres y mujeres a precios asequibles y con un estilo que combina juventud y buen gusto. De momento su mercado se centra en Italia y Rusia, por lo que en España es la menos conocidas de las firmas de Calzedonia.
El crecimiento de Calzedonia es imparable y no sólo cuenta con empresas propias sino que también tiene importantes participaciones en otras. Una de estas firmas es Aimée. Se trata de una marca de moda nupcial italiana, de la que el grupo de Veronesi tiene el 40% de las acciones. ¿Podríamos estar ante una nueva ampliación de mercado de la firma italiana? El año pasado Veronesi mantuvo conversaciones con la marca de lencería de lujo La Perla para comprarla, aunque finalmente las negociaciones no llegaron a buen puerto.
Buena imagen y embajadores
El éxito de Calzedonia no puede atribuirse sólo a sus productos. Como decíamos antes sus escaparates son fácilmente reconocibles junto a los de otras tiendas que tienen un mercado similar. La imagen que proyecta la empresa es otro de sus puntos a favor, así como el hecho de haber unido su firma al nombre de destacados embajadores.
Esta firma ha ido asociada en los últimos años a rostros importantes del mundo de la moda y a alguna de las mujeres más estilosas conocidas por el gran público. Entre las embajadoras de Calzedonia cabe destacar a las modelos Gisele Bündchen, Alejandra Alonso, Emily DiDonato o Laetitia Casta, así como a las actrices Sarah Jessica Parker o la española Paula Echevarría.
La actriz asturiana hizo doblete en el grupo textil, porque también fue embajadora de Intimissimi. Este puesto también lo han ocupado su compatriota Blanca Suárez o las modelos Alyssa Miller e Irina Shayk, entre otras.