Diane Kruger es una actriz y modelo alemana. Cuando nació, su madre trabajaba en un banco y su padre en impresiones.
De pequeña estudió ballet en la escuela Freese-Baus. Destacó mucho, así que le permitieron estudiar ballet con el Ballet Real de Londres a la edad de 13 años. A los 15, participó en un evento de modelaje, llamado Look of the Year, donde terminó en las finales.
Se mudó a París, la ciudad más importante en el mundo de la moda, dejando temprano la secundaria. Firmó con Elite y pronto desfilaba por las pasarelas con firmas como Dior, Yves Saint Laurent o Giorgio Armani.
Sus primeros pasos en el cine
En 2002 y motivada por su entonces esposo, el actor francés Guillaume Canet que actuó en La playa, Diane se introdujo en el mundo de la interpretación y apareció por primera vez en una película, The Piano Player, con Christopher Lambert y Dennis Hopper.
Después de este comienzo, Diane actuó en algunos filmes franceses. En el 2004 actuó junto a Rose Byrne y Josh Hartnett en el film romántico Wicker Park en la que se alberga una de sus mejores actuaciones.
Salto a la fama
Es en el film Troya, definitivamente el papel más conocido de Diane, es Helena, donde trabajó con renombrados actores como Brad Pitt, Orlando Bloom, Sean Bean, Eric Bana y la no tan conocida por aquel entonces Rose Byrne.
La película tuvo su secuela, National Treasure: Book of Secrets, en diciembre de 2007.
En 2008 protagonizó el video de los grandes almacenes españoles, El corte Inglés, para la campaña de otoño.
En el 2009 apareció en el film Inglourious Basterds de Quentin Tarantino como la sofisticada agente encubierta Bridget von Hammersmark, realizando una interesante actuación junto a Christoph Waltz , Mélanie Laurent y de nuevo conjuntamente con Brad Pitt.
Actualmente es una de las caras fijas en la alfombra roja y una de las mejor vestidas del panorama internacional.