Escoger el calzado es muy importante para todas las personas, pero sobre todo para los niños pequeños ya que ellos están creciendo y tanto los músculos de sus pies como sus huesos están en desarrollo. Los niños no pueden tener un calzado cualquiera, debe ser un calzado que se ajuste y se adapte a sus necesidades diarias y también, a su condición física.
Pero aún se vuelve más importante escoger el calzado en verano, cuando hace tanto calor y los niños se mueven tanto para el juego. El zapato en verano debe ser el adecuado no sólo a las necesidades de los niños y a su condición física, sino también debe ser un calzado que se adapte al clima. La mejor opción en verano sin duda serán las sandalias.
Transpirable
Resulta fundamental que el calzado del niño sea transpirable porque así el pie podrá 'respirar' y no retendrá la humedad generando mal olor de piel e incluso infecciones como hongos. Un calzado transpirable deberá estar hecho de materiales de buena calidad que no permita al pie sudar demasiado y que el aire pueda entrar y salir libremente por el zapato.
Con un buen ajuste
También es muy importante que el calzado del niño se ajuste bien a su pie y que sea confortable. Es necesario que no le cause rozaduras ni que tampoco pueda haber probabilidades de que la haga daño. Tanto el material como la forma del calzado deberá ajustarse correctamente al pie del niño para que le aporte seguridad al caminar y al correr sin causarle daños.
Unas buenas sandalias le darán el apoyo adecuado en el arco del pie y tendrá una plantilla curvada para ayudar a mantener los dedos del pie y que no se deslicen sobre el borde, por lo que le dará mejor control en el movimiento.
Buena tracción
El calzado que escojas para tus hijos en verano también deberá tener una buena tracción en la suela exterior con tetones de profundidad, que sean de goma. Si el pie se desliza dentro del calzado puede ser un problema grave porque significará que no se está ajustando bien al pie y que la tracción no es la que debe ser. Es importante que te asegures de que el pie está en su lugar y que el calzado se adhiere bien al suelo al caminar.
Que se ate bien
Cualquier calzado de verano como las sandalias contarán con correas que se entrecruzan en el pie en varias direcciones y que se pueden ajustar para adaptarse el tamaño exacto del pie. Es necesario que antes de comprar las sandalias a tu hijo te cerciores de que las correas son adecuadas para él.
En la actualidad, es mejor evitar las correas con hebillas que pueden hacer daño a los niños y que te centres sobre todo en calzados de abre y cierre fácil como los de velcro. De esta manera los niños también tendrán mayor autonomía para ponerse y quitarse los zapatos de verano.
Un aspecto positivo de usar calzado con correas es que cuando los pies comienzan a hincharse por el calor, se pueda aflojar el calzado fácilmente para que el niño se sienta más cómodo.
Los materiales
Los materiales del calzado en los zapatos de los niños también es necesario tenerlo en cuenta. Si estás buscando un calzado de niño que sea adecuado para que pueda caminar y moverse sin problemas -que es lo normal para todos los niños- deberás buscar materiales duraderos, resistentes y que sean capaces de ofrecer una buena tracción.
Por ejemplo, puedes buscar calzados que tengan las correas de poliéster, que se sequen rápido si se mojan y que sean lo suficientemente fuerte para que aguante cualquier golpe que pueda recibir el calzado con los movimientos de los niños. Además , los materiales también deberán ser ligeros y que no pesen apenas para facilitar el movimiento del niño.
El calzado de agua
Durante el verano también es bastante común que los niños realicen actividades de agua y que se moje el calzado. Por eso, los padres deben estar preparados para ellos y tener en el armario de sus hijos calzado infantil de agua para que no se estropeen el resto de calzado de verano. Siempre que un niño vaya a realizar una actividad de agua es buena idea que se tenga a mano un calzado para estas ocasiones.
Existen calzados para niños -y para adultos- que son ideales para utilizar en verano en zonas de agua. Están fabricados con materiales pensados exclusivamente con éste fin para potenciar la comodidad, la transpiración y también el secado rápido. Es necesario que te asegures que el calzado de agua también tiene una buena protección y agarre.
Otro aspecto que no se puede pasar por alto cuando se trata del calzado de agua en verano es que deberá tener una buena capacidad de agarre en superficies donde el agua esté presente, incluso cuando el calzado esté mojado. Los mejores zapatos para el agua tendrán suelas de goma exteriores que sean capaces de adherirse a las superficie y además, que puedan disipar el agua de debajo del pie a cada paso. Con el calzado de agua las superficies resbaladizas no tendrían que ser un problema.
Pies protegidos
Tanto si se trata de calzado para el agua como el calzado para diario, el pie de los niños deberán estar bien protegidos. Los niños se mueven mucho y siempre tendrán probabilidades de darse un golpe en un dedo del pie con rocas. El calzado de los niños en verano debe darles la libertad de poder moverse sin miedo a darse golpes. Por eso la puntera y la parte del talón deberán estar cubiertos para proteger de posibles daños o lesiones.
Estos son algunos consejos que no puedes olvidar para poder escoger el mejor calzado para los pies de tus hijos en verano. Una vez sabido esto, sólo tendrás que pensar en los gustos de tus hijos y en sus necesidades diarias para poder escoger el calzado que realmente se adapte a él y también, a tu bolsillo. Recuerda que siempre lo más caro no resulta lo mejor, debes apostar por materiales de calidad y que el calzado se ajuste al pie de tus hijos.