Una vez más vuelve la polémica a Abercrombie & Fitch. En esta ocasión han sido unas declaraciones en torno al público obejtivo de la firma de moda realizadas por el CEO Mike Jeffries las que han levantado la polémica.
Según recoge Business Insider, el directivo aseguró en una entrevista realizada en 2006 -que no había visto aún la luz- que sólo quieren clientes "delgados y hermosos"; esto es, dentro de su público no puede haber "gente mayor", sólo personas que cuando se pongan la ropa de Abercrombie se sientan "chicos 'cool' como sus empleados".
Es más, mientras que en su línea masculina sí que tienen tallas XL o XXL porque desean que esa ropa la luzcan futbolistas y gente musculada, en la línea femenina no existen dichas prendas. Y el citado medio indica que, al llamar a la firma para preguntar la razón de la falta de esas tallas, Abercrombie & Fitch no quiso hacer comentarios al respecto.
Sentadillas y flexiones, el castigo que reciben sus empleados cuando algo sale mal
Unas palabras que seguramente no han sentado nada bien a todas esas personas que usan esas tallas ignoradas por Abercrombie y que en alguna ocasión se les había pasado por la cabeza acudir a uno de sus establecimientos a comprar.
Aunque, por otra parte, qué se puede esperar de una empresa que castiga a sus empleados haciendo flexiones y sentadills cuando ocurre algo no sale como lo esperado... "Ahora, cada vez que cometamos un error, haremos diez flexiones. Sentadillas para las mujeres. Esto nos proporcionará un gran resultado: aprenderemos más de nuestros errores", decía un informe del jefe del Departamento de Prevención de Pérdidas.