Ágatha Ruiz de la Prada viene en una ocasión más a traernos todo el colorido, la alegría y la vuelta a la infancia a las que nos tiene acostumbrados. Esta vez el desfile ha sido acompañado de un fondo musical bastante nostálgico con temas en castellano que nos llevaban décadas atrás y con los que el público ha quedado maravillado.
Unas modelos con pelucas rosas, sombra verde y extensiones de pestañas nos han traído un carrusel de colores donde el rosa y el azul claros han sido grandes protagonistas, aunque las tonalidades base han ido cambiando a lo largo del desfile, pasando por verdes, naranjas, rojos o amarillos. Los estampados estrella han sido, como es común, los corazones, y también los lunares, las flores y los arcoíris de colores.
Comenzaba con prendas blancas con dibujos en rosa, azul y naranja claritos, unos diseños que también nos recuerdan a prendas que se llevaban en los ochenta y noventa, muy alegres y sin incorporar elementos chillones. Ágatha Ruiz de la Prada nos propone una amplia variedad de conjuntos, desde pantalones piratas estrechos con diversas blusas, siempre con mezclas de estampados, hasta vestidos de lo más fresco para la temporada primavera/verano. Las prendas amplias han sido la tendencia en este desfile, y para acompañar nos ha ofrecido sandalias, tanto de un sólo color, como una mezcla de tonos flúor como azul o amarillo. Los bolsos pasan por diferentes tamaños, según el conjunto, siempre con colores vivos y algo de flúor presente.
Cultura pop en diseños muy variados
De los diseños con cortes más clásicos, donde el estampado tenía el completo protagonismo, pasó a las propuestas más arriesgadas y a la vez sorprendentes, como prendas con grandes siluetas recortadas que dejaban ver otras piezas inferiores, o también vestidos con formas donde la mitad eran los colores del arco iris y la otra mitad una forma de paraguas de color azul con gotas de lluvia dibujadas, de lo más divertido. El lino y el algodón han sido los géneros que la diseñadora ha elegido fundamentalmente para esta colección, aunque también ha incluido sedas, satenes, organzas y plastificados.
La apuesta fuerte de Ágatha Ruiz de la Prada para esta Madrid Fashion Week ha sido un vestido al que ella ha catalogado como "para novias originales". Consistía en un vestido fucsia, con un corazón azul claro en el centro y forro interior también azul, corto por delante y con una larga cola por detrás, compuesto completamente por post-its. La misma diseñadora ha fusionado varias de las piezas que nos enseñaba en el conjunto que eligió para el desfile : un vestido recto, sin manga compuesto por post-its y estampado con varios colores a modo de arcoiris. Una peluca fucsia y unos zapatos de colores flúor han acompañado al look que resume su última colección.