Alexander McQueen celebra la feminidad sobre la pasarela de la París Fashion Week

A estas alturas es innegable que la conocida marca Alexander Mcqueen se ha ganado a pulso un puesto entre las mejores firmas del mundo. Los originales diseños de la marca han sabido conquistar el corazón de miles de mujeres, a pesar de las múltiples excentricidades que caracterizan a la firma desde sus inicios.

Con la directora creativa y diseñadora Sarah Burton a las riendas, la Semana de la Moda de París ha vuelto a ser testigo del ingenio y de la dedicación de las colecciones McQueen. Para la próxima temporada primavera/verano 2018 la firma se ha propuesto celebrar por todo lo alto la feminidad a través de looks que no dejaron indiferente a nadie.

Por si esto fuera poco, con motivo de la idea global de la nueva línea, el casting de modelos ha sido de lo más variado. Así, por primera vez sobre la pasarela de Alexander McQueen han desfilado modelos calificadas como 'curvy' para adaptarse a las necesidades del momento y avanzar en el mundo de la moda. Eline Lykke y Betsy Testke han sido las encargadas de desfilar con las prendas de la marca con el objetivo de ser "mujeres reales", un ejemplo a seguir para todas las demás marcas.

Otro de los aspectos que más ha llamado la atención del desfile ha sido el peinado de todas y cada una de las modelos ya que lo llevaban mojado. Como si estuviera lloviendo o hubiesen salido de la ducha, todas ellas llevaban un peinado despreocupado mientras lucían looks de lo más glamuroso.

La primavera/verano 2018 de Alexander McQueen

Para la próxima colección la firma ha apostado muy fuerte por las flores, tanto en bordados como en estampados o detalles en 3D. Este romanticismo floral se puede observar en múltiples vestidos elaborados con diversos materiales, como el tul, los volantes o las sutiles transparencias.

Sin embargo, la delicadeza de las flores contrasta con la estética rompedora que la firma quiere transportar al mundo. De este modo el cuero, las tachuelas y las botas planas de estilo punk o rock se combinaban con los vestidos y las faldas femeninos, elegantes y sofisticados que desfilaban sobre la pasarela.