Lo que comenzó como un pequeño proyecto de moda, se ha diversificado y convertido en una de las marcas de calzado más sofisticadas y reclamadas de la escena patria. Alma en Pena nació con la idea de acompañar a la mujer actual y aventurera, amante de las tendencias y del buen gusto. Un modelo de negocio que parte de una mujer que busca la funcionalidad, pero sin renunciar al estilo como referente. Prueba de ello es un calzado elegante y empoderado que no renuncia a la comodidad, con piezas especiales y únicas que cuentan una historia diferente y muy 'made in Spain'.
Una familia cuyas raíces brotan de la artesanía del calzado de toda la vida y en un engranaje en el que cada uno desempeña un papel fundamental y necesario, pues la marca crea, diseña y vende todas sus colecciones. La única culpable de que, justo en el pico más alto del verano y con unos termómetros que ascienden de los treinta y cinco grados en medio país estemos hablando de botas y calzado de invierno es: Alma en Pena. La firma española líder en calzado ha obrado el milagro de que haya perdido el interés en las sandalias y las esparteñas para rendirse al encanto de su nueva colección otoño/invierno 2019.
CALZADO HECHO PARA DURAR Y CON DISEÑOS MUY SETENTEROS
Y es que, aunque todavía suene con fuerza el eco de las rebajas, las ganas de abrazar la temporada estival aumenta y las botas y botines se presentan como una compra tempranera pero muy inteligente, tanto o más, que la clásica gabardina que nunca pasa de moda. Parece que Alma en Pena opina lo mismo, pues ha lanzado una colección de calzado que no dejará indiferente a nadie. Una temporada más, la pedrería juega un papel muy importante en los diseños de la firma, así como la confección, muy respetuosa con el medio ambiente, utilizando materiales de alta calidad y con la sostenibilidad por bandera.