Uno de los desfiles más esperados de la Paris Fashion Week es, indudablemente, el de Elie Saab. Desde que comenzó a presentar sus propuestas sobre la emblemática pasarela, la firma no ha defraudado a nadie y ha sabido conquistar el corazón de miles de mujeres gracias a sus glamurosos diseños.
Como era de esperar, la pasarela se llenó de originalidad, brillo y color, características propias de la aclamada marca. Para la próxima temporada Elie Saab se ha inspirado en la selva, en los bosques amazónicos y en la naturaleza que en ellos se encuentra para elaborar todas y cada una de las piezas de la colección.
Así, el Amazonas se subió a la pasarela ante la atónita mirada de todos los presentes que no perdieron ni un solo detalle. Personalidades de la talla de Nieves Álvarez se encontraban expectantes en el front row del desfile, y no es de extrañar que alguno de los vestido que desfilaron sean lucidos por numerosas celebs en las próximas alfombras rojas.Por si esto fuera poco, la modelo y ángel de Victoria's Secret Sara Sampaio participó en el desfile con un look muy moderno y actualizado. En definitiva, una explosión de color que está dando mucho que hablar, y es que Elie Saab ha vuelto a enamorar una temporada más con sus atractivas propuestas.
El Amazonas llega a París
La próxima colección primavera/verano 2018 se compone de numerosas prendas para el día a día, como pueden ser chaquetas de cuero decoradas con tachuelas, vestidos de corte mini o camisetas estampadas con divertidos dibujos o mensajes serigrafiados. Los trajes de chaqueta y los monos se fundían con los flecos, el animal print y los tejidos vaporosos.
Sin embargo, donde Elie Saab destaca es en la indumentaria nocturna con vestidos que dejan sin palabras a cualquiera. Esta vez las siluetas ajustadas de estilo femenino con detalles inspirados en la ropa interior han pisado fuerte, unidos a las transparencias y bordados de pedrería.
La amplia gama de tonalidades está basada, como no podía ser de otra manera, en elementos de la naturaleza. De esta manera, el amarillo del sol y el verde de la vegetación destacan junto al azul del cielo y los colores tierra, sin olvidar los básicos blanco, negro y nude, o los atrevidos como el rojo intenso o el estampado floral.