Hay ocasiones en las que la moda traspasa los límites de lo ficticio, donde los shows del mundo fashionista se revolucionan hasta más no poder, donde lo surrealista se sobrepone a lo común... El escenario: La multitudinaria ciudad de Nueva York. Un sinfín de flashes resplandecían mientras que las celebrities se apoderaban con estilo del photocall para asistir a lo que probablemente se considere uno de los eventos de la moda del año: por fin se revelaron todos los secretos de la colaboración low cost de Balmain para H&M.
Y la decepción no encontró lugar alguno a lo largo de la intensa velada. Repletas estaban las dos plantas que rodeaban la pasarela donde se desarrolló la exhibición de estilo. Armónica, sintética, ecléctica... Prestigiosas tops internacionales como la británica Jourdann Dunn o ángeles de Victoria's Secret como Alessandra Ambrossio y Karlie Kloss pisaron fuerte con un laborioso repertorio de mágicas piezas. Pero la maison no se caracteriza por su conformismo, por lo que también contó con la presencia de la reputada Gigi Hadid y por supuesto, grande entre las grandes: Kendall Jenner, musa del director creativo de Balmain, Olivier Rousteing.
El ADN de la casa francesa estuvo impregnado en cada combinación y la esencia de Balmain penetró en los corazones de cada uno de los amantes de la moda que no quisieron perderse esta fascinante gala. Brillaron los detalles en tonos dorados en mangas, botones, hombros transmitiendo cierta sensación de lujo. Exóticos estampados de animales salvajes y plumas, jumpsuits y pantalones con superposiciones de tejidos y grandes collares con multitud de cuerdas al más puro estilo egipcio formaron un mix que dio lugar a resultados exclusivos y de lo más especiales.
Fusión de lujo y precios asequibles
Tanto las chaquetas blazers más formales como las bikers de inspiración más casual se entremezclaban con cinturones rígidos de piel, con motivos geométricos incrustados que marcaban unas finísimas cinturas, así como con prendas plagadas de perlas y abalorios, a brigos con aires marineros, vestidos ajustados, sandalias acordonadas e incontables accesorios que reflejaban la naturaleza de la gran marca francesa.
Y por si no fuera poco, una más que sorprendente novedad cerraba un desfile para recordar. Una de las boybands más famosas de todos los tiempos se volvió a juntar para poner fin a un evento en el que las próximas tendencias fueron las reinas de la noche. L os Backstreet Boys entonaron la conocida por todos canción 'Everybody' y por un momento los asistentes se olvidaron de lo que acababan de ver para bailar a ritmo de la mítica canción.
Sin embargo, esto no sirvió para que tras acabar de mover el esqueleto, los asistentes amantes de la moda se lanzaron inminentemente y sin pensar a comprar las prendas que hace unos minutos habían fichado sobre la pasarela. La posibilidad de adquirir cada una de las piezas tras el desfile también hizo del evento una ocasión muy distintiva. Y es que el lujo y los precios asequibles no se fusionan habitualmente por lo que celebrities como Diane Kruger o la it girl Alexa Chung tampoco perdieron la oportunidad de hacerse con algunas de las sofisticadas piezas.