Con la temporada de festivales abierta tras la celebración del mítico Coachella, son muchas las firmas que están apostando por prendas que siguen este tipo de estética para la temporada veraniega. Bershka se ha rendido al estilo festivalero y ha lanzado una línea muy bohemia con la que pretende demostrar la estrecha relación que existe entre el mundo de la moda y el de la música.
Una insólita combinación de prendas ha llegado a la firma low cost juvenil con una colección que persigue los contrastes. En su línea femenina apuesta por ropa muy versátil que siguen tendencias aparentemente opuestas, como mezclar trajes de baño con ropa de calle y denim o prendas de estilo sport con otras clásicas. En definitiva, mostrar que se puede vestir de manera cómoda con un look casual y muy cool.
Festival Fever
Para los looks femeninos Bershka apuesta por volúmenes mezclados con siluetas ajustadas, crop tops de corte mini con cintas entralazadas en la espalda o en la cintura y volantes en escotes, mangas y hombros. El toque de originalidad y distinción llega de la mano de las aberturas laterales y pantalones de talle alto que pretenden arrebatar el trono al clásico pitillo.
Para conseguir el icónico outfit boho-chic con aires hippies la firma se decanta por una tendencia romántica con estampados de flores, vestidos extralargos y siluetas relajadas que incorporan detalles en forma de perlas. Tanto en prendas como accesorios predominan los colores neón, azul eléctrico y fucsia para conseguir un efecto aún más deportivo.