Concretamente ha sido el castillo Leopoldskron el que ha abierto sus puertas para ver desfilar las últimas creaciones de Karl Lagerfeld que se incluyen en la línea llamada Métiers d'Art, famosa por sus colecciones confeccionadas en los talleres artesanos que Chanel posee. Como no podía ser de otra manera, las verdes colinas y los lagos que rodean al lugar han sido los inspiradores de esta nueva colección pre-fall de temática austriaca.
No hay nada que a Lagerfeld se le resista. Su filtro es inconfundible, da igual cuál sea el lugar en el que se inspire, Bombay, Dallas, Moscú... todos ellos sirven para que la creatividad del diseñador se ponga en marcha y nos sepa sorprender siempre. Esta vez no ha sido menos y la colección nos ha dejado boquiabiertos, no solo por sus elaborados patrones y la superposición de tejidos, sino también por la puesta en escena, digna de admiración.
Pero si hay alguien que -con permiso de Karl- ha protagonizado el desfile, ésa es Cara Delevingne. It girl por excelencia, está por todas partes : carteles, revistas, campañas publicitarias de todo tipo, premios, películas, redes sociales... Y si este año no ha desfilado para Victoria's Secret, algún motivo de peso tenía que haber. Vaya que si tenía peso, nada más y nada menos que el desfile de Chanel ha sido lo que le ha apartado de la pasarela de lencería más importante del mundo, y no podía fallarle a su amigo Lagerfeld.
Cara Delevingne y Kendall Jenner cierran el desfile
Acabamos de verla interpretando el papel de Sissi emperatriz para Chanel junto al cantante Pharrell Williams y, acompañada de una guapísima Kendall Jenner, las dos han cerrado el desfile Métiers d'Art en la ciudad austriaca ante una gran expectación. Tiroleses y princesas austro-húngaras con perlas y tweed han sido quienes han dado vida a la pasarela pre-fall de Chanel.
La prenda por excelencia ha sido la chaqueta, pero también capas, cazadoras, pantalones y minifaldas combinados con leotardos, bordados y sobre todo, capas sobrepuestas que combinaban la paleta cromática de los negros, los tostados, los verdes, burdeos y algún que otro azul y blanco. El desfile, como apuntábamos, lo cerró Delevingne vestida de novia con un original diseño de volantes ceñido a la cintura con lazos en negro y por supuesto, de la mano del káiser, el creador, Karl Lagerfeld.