Tan solo 7 países supieron valorar, en la pasada noche del 23 de mayo, el trabajo artístico de esta cantante madrileña. Un potencial de voz y una puesta en escena que hizo rugir con fuerza al público de Viena y que acabó emocionando por completo a la que un dia fue concursante de Operación Triunfo. Lágrimas en los ojos que supieron sacar adelante el tema 'Amanecer' y que han hecho de esta experiencia una de las más importantes para la novia de David de Gea.
Bajo una capa roja
Porque además de una gran voz, Edurne también supo demostrar una calidad suprema en la puesta de escena, junto al bailarín Giuseppe di Bella. ¿ Dorado o verde ? Ésta era una de las incógnitas que la artista se encargó de desvelar en pleno escenario y que tenía que ver con su estilismo para esta LX edición de Eurovisión. Dos vestidos que ya mostró en sus respectivos ensayos y que quedaban ocultos bajo una reluciente capa roja. Aunque, definitivamente, fueron las transparencias y el color verde agua los que acompañaron a la artista en su actuación.
Y es que desde su llegada a la ciudad austríaca, la voz y la figura de España se han hecho notar en todos y cada uno de los rincones de Viena. Un flashmob con los eurofans, multitud de entrevistas y, sobre todo, un derroche de elegancia y estilismo insuperable. Así lo dejaba caer la representante Española al inicio de esta grata aventura, bromeando en pleno aeropuerto con numerosas maletas. Nada más lejos de la realidad, ya que el vestuario de la cantante ha sido, sin duda, uno de los puntos más trabajosos. Vestidos de fiesta y looks de diario que , tal y como apunta 20 Minutos, alcanzan casi la veintena y que han hecho que Edurne fuera una de las reinas indiscutibles del Festival.