Este miércoles 15 de octubre los Reyes Felipe y Letizia visitaron los Países Bajos por primera vez como Reyes de España. Tras la proclamación de Felipe VI, han sido varios los países que ambos han visitado: Francia, Portugal, Marruecos... Sin embargo, Holanda todavía estaba pendiente. Las buenas relaciones que unen a España y Holanda han propiciado este viaje en el que los Reyes fueron recibidos por el Rey Guillermo Alejandro de Holanda y la Reina Máxima de Holanda.
El Rey Felipe VI y la Reina Letizia llegaban al aeropuerto de Rotterdam-La Haya al mediodía y, dada la brevedad de este tipo de viajes oficiales, la jornada ha sido muy intensa. Desde el aeropuerto se han dirigido al Palacio Noordeinde, donde les esperaban los Reyes de Holanda con un almuerzo en su honor. Todo un pelotón de fotógrafos buscaba las miradas de la realeza de ambos países, y como ocurre siempre en este tipo de eventos, los estilismos de ambas Reinas son examinados al milímetro.Esta vez la comparación se ha caracterizado por los diferentes looks de las Reinas. La Reina de España se enfundó en un sobrio vestido rojo carmesí que se ajustaba perfectamente a su figura, con cuello camisero, borlitas en el escote y bordado con hilo de algodón satinado en forma de flores de inspiración oriental, tanto en la falda como en la manga, firmado, como siempre, por Felipe Varela. Como complementos, Doña Letizia eligió un cinturón fino de ante en el tono del vestido, bolso de sobre en tono beige y salones rojos de Magrit.
Dos outfits muy distintos
El look de Doña Letizia difirió mucho del de la Reina Máxima, cuyo estilismo fue mucho más sofisticado. La Reina de Holanda se decantó por un conjunto marrón cobre satinado de seda, formado por un cuerpo peplum con volumen en la cintura y falda lápiz. Lo combinó con salones bicolor, guantes, bolso de sobre y un maxi-collar babero al tono del vestido.
Ambas Reinas iban adecuadas, sin embargo, debieron ponerse de acuerdo para que sus looks fuesen algo más acordes. Lo que más llamó la atención fue la pamela que lució Máxima, mientras que Letizia llevaba la cabeza descubierta, un detalle que las distinguió muchísimo y que dejó claro que no se habían puesto de acuerdo antes, un gesto habitual en este tipo de actos.