Parece que nuestras celebrities nos van a seguir dando de qué hablar en este nuevo año. Cerramos esta primera semana de enero con los peores looks de alfombra roja que hemos encontrado y con un streetstyle de Emily Ratajkowski. ¡Empezamos!
EL FRÍO NO SE LE DA BIEN
Las musas de los trajes de baño también cometen errores a la hora de vestirse. Emily Ratajkoswki es la reina del bikini, de los bañadores y una de las tops de los cuerpos de escándalo en Instagram. La hemos visto también vestida de gala con modelitos que dejaban poco a la imaginación y con los que presumía de cuerpazo.
Pocas veces nos ha decepcionado la modelo con sus looks, pero parece que Emily sabe muy bien cómo combinar las prendas del verano y, sin embargo, con el invierno no se lleva tan bien. Quizás sea que estamos demasiado acostumbrados a verla con looks sexys y por eso este estilismo nos llama tanto la atención, aunque sinceramente creemos que Emily se equivocó por completo escogiendo este outfit.
Los colores del otoño han marcado este look que escogió la modelo para pasearse por las calles de Nueva York. Lleva un abrigo de pata de gallo con cinturón en la cintura y el bajo con una ancha capa de pelo blanco. Lo combinó con un pantalón color camel que nos convence bien poco al contraste con el abrigo. Y para rematar colores, unas botas calcetín de color rojo tierra que por muy bonitas que son, no termina de combinar con el resto del outfit. De complementos, la modelo escogió un mini bolso negro con detalles dorados de Prada, unas argollas doradas bastante grandes y unas gafas Matrix.
MALAS COMBINACIONES
Esta semana ha tenido lugar en California la vigésimonovena edición del Festival de Palm Springs. Como era de esperar, allí pudimos ver a muchas caras conocidas posando a su paso por la alfombra roja. Una de las actrices que pudimos ver allí fue Laurie Metcalf, más conocida por su papel de Mary Cooper en la conocidísima serie 'The Big Bang Theory'.
La actriz escogió para la ocasión un colorido vestido en tonos fríos, azules y blanco, que no le sentaba del todo bien. En el pecho no se ajustaba a su cuerpo y se le formaban unas arrugas demasiado visibles. El diseño lo firmaba Christian Siriano.
No acertó tampoco con los complementos. Más concretamente no acertó con el color. Escogió el dorado para los zapatos, el clutch y las joyas; y aunque el azul y el dorado sean colores que de por sí combinan bien, la mezcla de tantos tonos azules, más el blanco y el dorado, hacen que el resultado no sea tan satisfactorio. Los zapatos son de L.K. Bennet y las joyas de Dean Davidson.
MENUDA HORTERADA
Continuamos en este festival de cine para hablar de la siguiente en nuestra lista de peor vestidas de esta semana. Ahora es el turno de la actriz estadounidense Saoirse Ronan, hija del actor Paul Ronan. Con 23 años ya lleva 11 años de carrera de actriz; menos mal que parece que en ese mundillo tiene futuro, porque en el de la moda... No va muy bien.
Saoirse declaró en su paso por la alfombra roja de esta gala, que tiene una estilista muy brillante, Elizabeth Saltzman, que es quién se encarga de formas sus estilismos para osaciones especiales. Y nosotros sentimos decirte, Saoirse, que tu estilista no dio pie con bola cuando escogió este look... No es bonito y no te queda bien.
El vestido que llevaba la actriz es un diseño de Gucci de tela de satén de dos colores: naranja y rosa. El corte de los colores se unía en una línea diagonal desde el hombro hasta la cadera con dibujos de lazos con brillantes y pequeñas aberturas entre lazo y lazo. También consta de una abertura hacia abajo desde la cadera. No sabemos en qué momento su estilista le dijo a Saoirse que este vestido era una buena opción para ella, ya que en el pecho y la barriga no le hacen ninguna justicia. Los zapatos plateados de glitter con con el detalle de la una abeja en la tira delantera también los firma Gucci; estos sí que son bonitos, pero tampoco podemos decir que combinen muy bien con el resto del look ni con las joyas de Fernando Jorge que llevaba.
DEMASIADO ATREVIDO
Está claro que cada persona se puede vestir como le venga en gana, pero cuando se trata de asistir a galas hay que esforzarse un poco por llevar un estilismo adecuado y que siente bien, sino pasa lo que pasa y acabas metida en el saco de los peores looks como le ha pasado a Suzanne Somers.
La actriz estadounidense, a sus 71 años sigue vistiéndose a veces como lo haría una quinceañera. Y sintiéndolo mucho y siendo coherentes, tenemos que decir que no le sienta bien. No se sacó partido con su beauty look y tampoco lo hizo con su estilismo en el Festival de Cine de Palm Springs.
Suzanne llevó un vestido mini de lentejuelas con estampado de tigre en negro y dorado. Lo que no nos gusta es lo excesivamente corto que es, por mucho que la actriz a su edad pueda presumir de tener unas piernas perfectas. A este vestido de Balmain le falta tela por todas partes, también en el escote en V, que aunque no es de los más excesivos que hemos visto, con tanto pecho como tiene la actriz, más que sensual se ve vulgar. Tampoco acertó con los complementos, puesto que escogió unos stilettos, un estilo de zapato que gusta y que está volviendo a nuestros armarios ahora, pero de un color dorado que no cuadra con el del vestido. Las joyas son otro fallo, los pendientes brillan en exceso y son demasiado largos.
SUSPENSA EN STREET STYLE
Acostumbrados a ver siempre a las celebrities con looks de fiesta o de gala, con maquillajes perfectos y peinados que ya nos gustaría a muchas conseguir hacernos más de una vez, siempre se nos hace raro cuando conseguimos verlas con looks de calle; porque aunque hay algunas a las que el street style sí que se les da bien, hay otras que son un auténcico desastre.
Una de esas celebrities que no suele acertar demasiado con este tipo de estilismos es Olivia Wilde, sobretodo cuando se trata de looks de invierno. El frío conlleva combinar muchas prendas y usar a veces algunas que no nos sientan del todo bien pero que nos permiten salir a la calle sin tener que preocuparnos el frío.
Esta semana vimos a la actriz paseando por la Gran Manzana con un outfit que dejaba mucho que desear, especialmente por los leggins rojos que llevaba, que además le formaban bolsas en la entrepierna. Lo combinó con las botines negros de Doctor Martens que ya le hemos visto alguna que otra vez y con una sudadera gris muy sport. Para arriba, optó por un plumas azul marino, que junto con las botas es lo único decente de este outfit digno de andar por casa.