Se acerca la Semana de la Moda de Madrid. La Madrid Fashion Week abrirá sus puertas el próximo lunes 18 de febrero a las 11:30 horas con un desfile de excepción. Y es que este año la elegancia de Andrés Sardá es el encargada de abrir la Pasarela.
En la propuesta, Andrés Sarda explora los límites de la moda y la vida, la realidad y el sueño. La lencería se deja seducir por el boudoir de una mujer amante del lujo y sibarita, entusiasta de los detalles cuidados y las aventuras creativas. Su personalidad compleja no renuncia a ninguna de sus dos facetas; luminosa y lúdica cercana al color o misteriosa y sutil como un trazo de tinta negra.
El encaje en total look o en aplicaciones y detalles es el gran protagonista de la colección, en su versión alta costura y también Chantilly elástico. En cuanto a la paleta de colores los cromatismos se aplican con la sensibilidad de un joyero y la retina de un maestro pintor.
Cristales de Swarovski forman parte de los estampados de Andrés Sardá
La gama de los materiales preciosos como la amatista, empolvados como el rosa inglés o profundos como el óxido, el verde musgo o el púrpura lucen solos o con toques de encaje en tonos contrastados. En cuanto a la decoración el estampado estrella es el efecto caleidoscopio, así como los flocados de terciopelo y los cristales de Swarovski.
La intensidad de este mundo luminoso encuentra su alter ego en la oscuridad del negro, al que la colección rinde su otra mitad. Una dualidad de conceptos en la que la fluidez de la muselina de seda, el voile y el encaje dialogan con la densidad de la napa, el metal o el cristal y en el que minimalismo sintoniza con el exceso.
Objetos de deseo como el short de encaje, el body lencero y los sujetadores con acabado de top pensados para salir del interior al exterior cierran el circulo de este viaje al centro de la noche, paraíso privado y estado mental en el que todo es posible.