La maison francesa Dior inundó el palacio de Cibeles de Madrid del más absoluto glamour con la cena de gala que dio para más de 700 invitados. Muchos de los rostros conocidos de nuestro país no quisieron perderse el evento y acudieron con los mejores vestidos que tienen en su fondo de armario.
En el photocall pudo verse poco color. El negro fue el claro protagonista de la noche, ya que la mayoría de las invitadas optaron por este tono en esta fiesta tan especial. En minivestidos, trajes con vuelo y complementos, los tonos oscuros fueron el detonante de elegancia de la noche.
El negro, color protagonista de la fiesta Dior
Entre las invitados que prefirieron el color negro fueron Eugenia Silva, una de las más guapas de la fiesta, con un vestido de brillo de corte a la rodilla, escote asimétrico y clutch de pitón, o Cecilia Gómez, que escogió un vestido de corte recto y escote barco. Otras que también eligieron el negro como su color para esta noche fueron Clara Alonso y Cristina Tossio, ambas con minivestidos que dejaba poco a la imaginación. Fiona Ferrer, Amelia Bono y Bárbara Lennie, por su parte, optaron por vestidos con un bajo por encima de la rodilla.
Hubo invitadas que arriesgaron un poco más y se presentaron en el evento de Dior con estilismos más coloridos. Es el caso de Berta Collado, que se olvidó de que estamos en otoño y se presentó con un vestido muy veraniego de colores, y Blanca Suárez, guapísima con un vestido rojo con escote de pico y volantes. Más llamativas se presentaron Carmen Lomana, con un look muy étnico en tonos rosas, y Laura Ponte, algo extravagante con un vestido joya en rojo con medias del mismo color.
Los hombres no destacaron en el evento Dior
Los hombres, en esta ocasión, no arriesgaron demasiado y todos ellos se presentaron con trajes oscuros. El más elegante, sin duda, fue el actor Martín Rivas, que reapareció tras el final de El Internado con un traje oscuro, corbata y un peinado engominado al que no nos tiene acostumbrados. Más formal se presentó el diseñador Juanjo Oliva, con corbata de lunares, al contrario que Jordi Mollá y Carlos Francino, que aparecieron en la cena Dior sin corbata e, incluso, descamisados, como el actor Eloy Azorín.