El comienzo de la tercera jornada de la Madrid Fashion Week ha corrido a cargo del desfile de Francis Montesinos, quien para una ocasión tan especial ha presumido de su puesta en escena y ha abierto la pasarela con una interpretación en directo del grupo Saudade que interpretó temas como "La bien pagá" y con la del bailarín Rafael Amargo, quien se encargó de abrir y cerrar la presentación.
Así, y mientras el bailaor graíno continuaba a su ritmo danzando en la pasarela, las modelos comenzaron a desfilar luciendo las propuestas estivales de Montesinos para el próximo 2014, quien a través del colorido y la inspiración flamenca volvió a demostrar, una vez más, fidelidad a su estilo: atrevidas y originales colecciones que reinterpretan las raíces de la cultura española.
'Pura Vida': una colección homenaje al flamenco inspirado en Miguel de Molina
Las propuestas primavera/verano 2014 de Francis Montesinos incluyen prendas tanto en su línea femenina como masculina. En este sentido, las y los modelos desfilaron de manera intercalada y con looks que compartían diseños y estampados: pantalón corto o bermudas y camisa para ellos, vestidos vaporosos con muchos volantes para ellas.
Precisamente, el diseño en torno al que giró la colección fue un estampado que incluía castañuelas, abanicos, peinetas, flores y hasta guitarras españolas en tonos rojo, verde y amarillo y que se transformaban en prendas de todo tipo: vestidos, monos, pantalones y blusas.
Pero esto no fue todo. Las colección de Montesinos para la próxima época estival está formada también por varias gamas de prendas que están pensadas para todos los momentos del día y necesidades: ropa interior, vestidos de noche, outfits de día y otros más casuales; todos dominados por los estampados, los volantes, el movimiento y sobre todo, por un espectacular y alegre colorido.
A ellos se suma un amplio abanico posibilidades formado por piezas elaboradas en tejidos como el punto o la gasa y transparencias, bordados troquelados y vaciados, rejillas, estampados de rayas verticales con acabados brillantes y detalles dorados, flecos, lentejuelas e incluso texturas metalizadas y cuero.
La colección, que ha sido definida por el propio diseñador como una defensa a las libertades y derechos humanos, no pudo cerrar de otra manera: llamativos vestidos al más puro estilo carnaval brasileño adornados con flores y coloreados por los tonos del arco iris, un claro guiño a la bandera del orgullo gay.