Sin duda, la moda de los años 60 supuso una verdadera revolución. Si cada década estuvo marcada por su éxito personal, en este caso, algunos cambios e hitos del vestuario continúan vigentes hoy en día, más vivos que nunca. Por un lado, uno de ellos fue la llegada de la minifalda. Por otro, la revolución de Paco Rabanne. El diseñador español revolucionó la moda de la década de 1960 cuando cambió la seda y el tafetán por los sopletes y las herramientas siderúrgicas propias de la industria vasca.
Bautizada con el nombre ' Doce vestidos insoportables en materiales contemporáneos ', la colección estaba conformada por una amplia variedad de vestidos de noche, trajes de baño, joyas, cinturones, gafas de sol y monederos, todos ellos confeccionados con de plástico flexibles y móviles, dispuestos en espectaculares formas nunca antes vistas: cubos, espirales y círculos, impresos en colores muy llamativos: naranjas, rojos, dorados, plateados.
ALICATES, ALAMBRES Y TROQUELES
El Palais de la Cité, un edificio histórico de París que ocupa el muelle del Reloj, residencia de los reyes de Francia de los siglos X a XIV fue el enclave elegido para la celebración de uno de los desfiles más esperados de la Semana de la moda parisina. Especialmente conocido por haber acogido el tribunal revolucionario en la época de la Revolución Francesa, es el lugar donde Maria Antonieta pasó sus últimos días antes de ser ejecutada en la guillotina. Un espectáculo capitaneado por el diseñador Julien Dossena que planteaba un original encuentro entre arte, historia y futurismo. Bajo las inmensas columnas de este enclave histórico, las siluetas monacales imaginadas por su director creativo recrea la eterna lucha entre el bien y el mal, el deseo y el yugo, entre la fe y la ciencia que se refleja en el contraste de los tejidos.
PONTENTE CONTRASTE, A LA VISTA Y AL TACTO
Los flecos continúan como una de las tendencias fuertes de la temporada, estaban por todas partes: tejidas a un cárdigan, en las muñecas, bajos de las faldas y en vestidos largos de corte lápiz. Paco Rabanne, el metalurgio de la moda, siempre se ha posicionado como una marca futurista. Bajo la dirección de Dossena es mucho más que eso. Una experimentación técnica, sutil y extraordinaria que origina un nuevo marco de moda. "Hay que respetar al hombre; no olvidemos que, más que una marca, Paco Rabanne era un hombre expresando sus pensamientos, por eso resultaba tan especial " apuntaba el diseñador en tributo al diseñador en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.