Hay momento que pasan para la historia y tarde o temprano merecen ser recordados o incluso recreados. Claro ejemplo de ello fue la el gag protagonizado por Mariah Carey y Whitney Houston en los premios Grammy de 1999 cuando ambas aparecieron sobre el escenario con el mismo vestido marrón de Vera Wang. Tras una pequeña 'pelea' de divas ante la audiencia, cada una de ellas se quitaba parte de la falda para vestir un diseño diferente de la otra y solucionar así su desencuentro. Ahora, 23 años después, ha tenido su remake igual de icónico.
Las protagonistas esta vez eran Dua Lipa y Megan Thee Stallion y el escenario también era el de los premios Grammy, pero en la 64 edición de este 2022. Ambas lo hacían para entregar el premio a Mejor artista revelación, el que ellas mismas ganaron en 2019 y 2021 respectivamente y este -alerta spoiler- este año se llevaría Olivia Rodrigo. Ambas aparecían en escena con un mismo look, pero esta vez no era de Vera Wang, sino de Versace.
Con el cameo de Donatella Versace
Dos vestidos ajustados largos drapreados en un lateral a base de los también icónicos imperdibles dorados con la Medusa de la casa italiana. Como parte del guión, ambas protagonizaron también un pequeño cara a cara al más puro estilo Carey-Houston, pero con un cameo especial. " ¡Estás acaparando toda la atención! ", le echaba en cara Megan Thee Stallion a Dua Lipa. " Bueno, me dijeron que tenía la exclusividad [del vestido]. Voy a tener que hablar con Donatella ".
Y no hizo falta esperar porque desde la audiencia aparecía la propia Donatella Versace, que sería la que pusiese fin a este particular sketch: "¡Estas son mis chicas!", decía la diseñadora italiana mientras soltaba uno de esos imperdibles icónicos y retiraba parte de la falda del vestido, desvelando así el verdadero estilismo que ambas lucirían esa noche y que si diferenciaban por el largo y corte de sus faldas dando así lugar a dos looks mucho más diferenciados, al igual que en su día habían hecho las otras dos icónicas cantantes.