Amante de la moda y las alfombras rojas o no, muy poca gente se quedó sin ver el posado de Kaia Gerber el pasado mes de octubre en la particular alfombra roja de la gala del Academy Museum que por segundo año consecutivo se celebraba en Los Ángeles. La modelo posaba con un vestido efecto dos piezas compuesto de un top efecto body de libra negro ajustado a su cuerpo junto con una falda drapeada al frente que generaba el efecto de estar únicamente sujeta a sus curvas. Solo sus dedos y su rostro quedaba al descubierto.
Un rostro que, después de varios años desde que saltó a la fama y se subió a las pasarelas, se asemejaba más que nunca al de su madre, Cindy Crawford, y una de las primeras topmodels de la historia. Y podría decirse que fue precisamente esto lo que acabó haciendo de ella maniquí perfecta para esta campaña primavera verano 2023 de Alaïa.
Pieter Mulier se quedó prendado de Kaia Gerber ya en 2017 cuando la modelo debutó en la New York Fashion Week para Calvin Klein 205W39NYC capitaneada entones por Raf Simons y para quien trabajaba Mulier. Volvieron a verse el pasado 2022 en plena Fashion Week de París y el diseñador se quedó alucinado con lo mucho que había evolucionado la joven y sobre todo por el gran parecido que tiene con su madre según pasa el tiempo.
Gerber emulando a Crawford
Mulier tuvo un flechazo con Gerber como en su día tuvo el propio Alaïa con Crawford cuando la escogió en más de una ocasión para presentar sus colecciones sobre la pasarela. "Estaba tan impresionado con la forma en que creció", le confesaba Mulier a Vogue para presentar la campaña. El diseñador confiesa que, a pesar de ser una 'nepo baby', Gerber ha demostrado su valía con su trabajo y siendo una perfecta heredera de los talentos de su madre: " Kaia representa algo. De hecho, es bastante importante para su generación: una de las top models más raras que tenemos hoy en día y además se está convirtiendo en actriz. Está en el punto de su vida en el que se dirige hacia algo más grande".
Para él no había duda de que Kaia Gerber era quien tenían que encargar esta colección, especialmente después de verla con uno de lo diseños sobre la alfombra roja. Su confianza en ella era tan plena que en la sesión de fotos no estaba ni el propio Alaïa, que tras dar unas indicaciones confió plenamente en ella y en el fotógrafo Tyrone Lebon.
"Yo no quería un gran set (...) Aquí solo estaba el peluquero y maquillador, Tyrone, un asistente, un estilista, Kaia y su novio [Austin Butler], nadie más. Así que se sintió más como un rodaje de los 90. Creo bastante en la energía entre un fotógrafo y una modelo. Me gustó bastante la idea de que solo ellos hicieran lo suyo y ya. Básicamente, quiero algo más que una forma natural de cómo solía ser", explica Mulier sobre la campaña.