A pesar de que los inicios de Skims, la marca de ropa de Kim Kardashian, no fueron precisamente buenos debido a su equivocado primer nombre, 'Kimono', por el que fue tachada a lo largo y ancho del planeta de aprobación cultura e incluso racista; gracias a su rápida aceptación del error y una pérdida de varios millones de dólares, la hermana Kardashian por excelencia volvió al mercado bajo el nombre Skims haciendo borrón y cuenta nueva. Y como cualquier polémica que pueda asolar al famoso 'klan', acaba convirtiéndose en un negocio más que rentable. Tanto que esta marca puede ser la que lleve a la esposa de Kanye West a convertirse en multimillonaria al igual que su marido y su hermana pequeña Kylie Jenner.
"El epítome de la ropa de salón de lujo"
Llamada ' Cozy Colletion ', esta línea es " el epítome de la ropa de salón de lujo ", versa la propia página web de la marca. Tanto el top como los dos pantalones de tiro alto (cortos y largos) y la bata de andar de andar por casa están fabricadas con hilo de boucle suave y transpirable que ofrecen "una valides y comodidad increíbles para el lujo cotidiano". Algo que demuestra a la perfección la propia Kim Kardashian las imágenes promocionales tomadas en su propia casa.
Esta colección cuenta también, al igual que con las mallas, en varias tonalidad en función de los diferentes tonos de piel. Va desde el blanco roto, al rosa pastel pasando por un marrón chocolate hasta el negro más intenso. Por supuesto, y dada la gran alusión que la propia web hace a la palabra "lujo", no es de extrañar que sus precios no sean tan bajos como le gustaría a la gran mayoría. El top cuesta 52 dólares, la bata 128, el pantalón corto 58 y el largo 88.