La Alfombra Roja se vistió con la mayor exquisitez con la que nos sorprendieron algunas de las actrices e invitadas a la gala más importante del cine español, los Premios Goya 2016. Grandes profesionales y mujeres que alzaron a la categoría de exquisitez el photocall. Las tonalidades que más destacaron fueron los colores neutros, así como el negro, el blanco y el crudo; los grandes triunfadores.
Piezas amplias
El vestido de Elie Saab que lució Silvia Abascal en color nude de palabra de honor y con corpiño de abalorios engarzados, resaltando sobre una falda larga de tul con vuelo plisada y con efecto de cola. Un vestido de gala que mostró el lado más romántico de la gala. Otra de las actrices que se decantó por un vestido amplio fue Juana Acosta, eligiendo el negro como la apuesta más segura y elegante, con el escote corazón y de manga caída. El detalle a destacar: la abertura abertura frontal. La gargantilla y los pendientes de brillantes son el complemento perfecto.
Cristina Brondo lució una perfecta pieza en tono crudo con plisados y cuerpo cruzado. Una forma del vestido que realzaba el maquillaje oscuro y el recogido sencillo. Todo un acierto con el estilo romano. Clara Lago eligió un vestido de gala de seda en azul oscuro y con manga cruzada sobre el pecho: una pieza que parece fácil de llevar, pero solo ella podía lucirlo así de bien. Un glamour que ilumina la alfombra con el corte princesa asegurado.
Efectos florales
Natalia de Molina fue una de las grandes triunfadoras, con un vestido recto y ajustado en blanco y con detalles florales engarzados de forma aleatoria. El detalle del cinturón fino remarcando la cintura. El vestido le remarcaba una forma perfecta que fue todo un acierto. Otra que se decantó por los detalles florales fue Mariam Bachir, que arriesgó más que De Molina gracias a un Escada con aberturas en la cintura y el corpiño asimétrico.
Mix blanco y negro
Aura Garrido, con el detalle floral sobre el hombro, eligió una pieza ajustada y con uno de los tonos más preferidos por la alfombra de este año: el blanco. Detalles como los complementos y la cola del vestido daban un toque de elegancia exquisita. Otro de los blancos triunfadores fue el vestido de Ana Álvarez con las mangas y parte del pecho con transparencias; más arriesgado que el anterior pero igual de sofisticado.
Ajustado, con transparencias, escote hasta la cintura y brillantes engarzados en el vestido negro de Ana Locking con el que Cecilia Freire mostró su lado más sensual y provocador. Ana Castillo, con su maxi abertura en la parte frontal de la falda y el escote hasta la cintura con un efecto bicolor en crudo, una marca cruzada sobre el pecho que rompe con la monotonía del negro absoluto del resto de la pieza.