Existe un mito que dice que las mujeres elegimos nuestra ropa interior según como nos sintamos cada día. No sabemos si esto es cierto, pero lo que sí es una verdad indudable es que si nos queremos sentir de 10, tenemos que empezar sintiéndonos a gusto desde dentro. Andrés Sardá celebra el arte de la mujer de vestirse no sólo por fuera con una minuciosamente confeccionada línea, para aquellas que quieran sentirse seguras en todo momento.
Cada pieza está moldeada con un meticuloso patronaje, con el objetivo primordial de adaptarse a las curvas del cuerpo, subrayando su belleza pero respetando sin excepción el bienestar y confort de la mujer, prioridad número 1 para la firma.
Dos encajes y tres gamas de color
Louise Brooks ha sido la afortunada protagonista de la campaña publicitaria. Y no es para menos, la modelo lleva la elegancia y la sensualidad en la sangre, y no ha dudado en posar con seguridad ante la cámara, que ha conseguido inmortalizarla mostrando el potencial de los conjuntos de Sardá. Dos tipos de encajes desvelan el estilizado cuerpo de Brooks, que se integran en la anatomía femenina depurando sus formas con estilo.
¿Y la paleta de colores? Hay mujeres que suelen optar por el blanco y negro como sus básicos, y otras quizá algo más intrépidas que optan por el color en sus conjuntos de ropa íntima. La diseñadora Nuria Sardá ha tenido esto en cuenta y, por ello, la elección estará entre tres distintivas gamas que son: el negro intenso, el taupe que se impone como la nueva versión del nude, y un luminoso verde que se asemeja al color de las esmeraldas.
Diminutas puntillas, sensuales encajes, pequeños detalles florales... Los conjuntos tienen una gran riqueza de detalles que sin embargo no les hace parecer sobrecargados en absoluto. Cada combinación se perfila con delicadas cintas de seda decoradas con cristal de Swarosvski engamado, componente inédito y atrayente que aleja a esta colección de las típicas colecciones de lenceria de encaje.