Es evidente que la tecnología ha cambiado nuestra forma de vivir, la cual impregna todos y cada uno de los aspectos que la integran. Vale la pena entonces, empezar a reflexionar sobre la tecnología en la vida cotidiana. Un paisaje completamente moderno que gira en torno de dispositivos móviles, aplicaciones y máquinas con inteligencia artificial. Y es por todas estas razones enumeradas que los procesos artesanales y la tradición allanaron el camino en cuanto a avance se refiere. Logrando multitud de transformaciones que antes sólo eran posibles en nuestra imaginación y hoy en día forman parte de nuestra vida diaria. Tradición que se preserva y sobrevive a través del tributo y la reinterpretación valiente de la historia del arte.
' Una casa de tradiciones, no tradicional ', con esta frase reflexionaba el director creativo de Loewe, Narciso Rodríguez, a su llegada a la maison del 'escarabajo' en 1980. La casa de lujo española, con Jonathan Anderson como director creativo y cara visible de la compañía, toma prestado el movimiento Arts and Crafts e incorpora y reinterpreta las obras de artesanos icónicos en sus colecciones cápsula anuales. "Cada año hemos abordado diferentes artes y oficios de gran calado y reconocimiento", explica Anderson. Este año ha dirigido su atención a las obras del ceramista británico William De Morgan. "Para mí, hacer la colección William de Morgan ha sido un proceso muy natural; fue un colaborador esencial del Arts and Craft y un alma fantasiosa de su tiempo". El ceramista se distinguió por sus vanguardistas métodos de moldeado, horneado y aplicación del color y las formas; métodos innovadores que casan a la perfección con los valores de una casa de modas con un calado artesanal que sobrepasa el siglo de historia.
DISPONIBLE A PARTIR DEL 15 DE NOVIEMBRE DE 2019
La influencia e inspiración medieval y persa del artista en esta nueva colección de Loewe se reinterpreta e impregna en cada una de sus piezas, perfectamente diseñadas para hombres y mujeres, indistintamente. Una oda a la fantasía y a la magia en sus creaciones. La naturaleza continúa con el espectáculo de fantasía y color desde el índigo bordado con esmero sobre un abrigo de gran envergadura, el patrón de pavo real sobre cerúleo y amarillo y el gran drama del dragón rojo de lana sobre punto. Una colección que se rinde a las labores artesanales de la piel con motivos florales que adornan el Puzzle de cuero Loewe, bolsos con hamacas y prendas de punto hedonistas que representan la siluetas fantásticas del imaginario del ceramista. Algunas prendas se retuercen en secuencias completas de azulejos sobre suaves tejidos naturales y piel de ternera. Otras, se cosen a mano sobre lana y adornan con un solo detalle, grande y exuberante. Algunas brillan con un majestuosa minucia integrada, mientras que otros solo se representan con un sutil grafismo. Pero mire por donde se mire, las criaturas fantásticas de William de Morgan parecen recién salidas del universo del siglo XIX y que se esconden entre los albores de la naturaleza y el epicureísmo.