La gala del MET 2018 tenía como temática principal la influencia del arte católico en la moda. Sin duda, una oportunidad perfecta para lucir trajes de fantasía como fue el caso de Lili Reinhart o Blake Lively. El problema viene cuando los diseñadores se pasan de la raya y crean modelos que son de todo excepto estéticos y elegantes. Este es el caso de nuestras siguientes peores vestidas de la Met Gala 2018.
OVERSIZE SIN SENTIDO
La actriz Frances McDormand, ganadora de un Oscar por 'Tres anuncios en las afueras', lució un diseño de Valentino en el que sobraba tela por todas partes. La pieza principal del look es la larga capa en color azul verdoso con un enorme cuello de volantes. Por debajo, se podía intuir un vestido de la colección de primavera 2018 de Pierpaolo Piccioli en color pistacho, con falda de tubo y manga francesa a juego con las sandalias de plataforma.Pero si ya de por sí las prendas son exageradas, los complementos no se quedan atrás. La actriz, a cuyos excesos y llamadas de atención ya nos estamos empezando a acostumbrar, no dudó en ponerse un gran tocado de Philip Treacy a juego con el color de la capa. La pieza, que parece que imita a las hojas de una planta, le cubre toda la cabeza. Parece que no se pensó mucho qué ponerse para la ocasión, y es que la propia actriz admitió que preparar el look sólo le había costado 5 minutos.
CON EL BELÉN A CUESTAS
Parece que Sarah Jessica Parker se tomó muy en serio la temática de la fiesta, tanto que se convirtió en una auténtica figura religiosa digna de ser sacada a hombros en un paso durante la procesión de Semana Santa. El diseño, firmado por Dolce & Gabbana, está totalmente recubierto de detalles dorados y corazones en color rojo.El vestido, que hay que admitir que es toda una obra de arte, cuenta con unas hombreras abollonadas y manga larga acampanada. La falda, de tubo, está rematada por una larga cola. Pero, sin duda, el detalle más extravagante está encima de su cabeza: la actriz de 'Sexo en Nueva York' lució un belén en forma de corona. Todo el look, en conjunto, convertía a Sarah Jessica Parker en una especie de Reina de Corazones disfrazada para ir a la Iglesia.
VIUDA NEGRA
Madonna no suele perderse una cita de este tipo, y es que la cantante disfruta como pocos de una fiesta temática en la que poder lucir modelito extravagante. Sin embargo, en esta ocasión la cantante se excedió y se aproximó peligrosamente a la parodia con este look de Jean Paul Gaultier. El vestido podría haber sido perfecto para una comunión si no fuera por el color negro y la cruz de rejilla y transparencias en el pecho.Madonna no podía conformase sólo con eso y se cubrió la cara con un velo de rejilla negro y las manos con unos guantes transparentes. En la cabeza, una espectacular corona de cruces dorada y plateada que poco podía añadir al ya de por sí recargado estilismo. En conclusión: una Madonna que parecía sacada de un cuento gótico que derrochaba de todo menos glamour.
POCA TELA
La modelo Cara Delevingne se siente en su salsa cuando se trata de este tipo de eventos. Sin embargo, la línea entre la elegancia y la extravagancia es muy fina cuando se trata de este tipo de fiestas temáticas y, en esta ocasión, Cara Delevingne se ha pasado al lado oscuro. El vestido elegido para la ocasión y diseñado por Dior está confeccionado con una tela transparente con detalle de rejilla a expresión de las largas bandas negras que recorren verticalmente la pieza.La tela en color nude estratégicamente colocada tapa el pecho de la actriz, mientras que en la parte inferior se puso una braguita negra a juego con el resto del vestido. La modelo se aseguró de llamar la atención con el tocado negro y detalles colgantes que le cubría la cara. En cuanto al beauty, éste también merece mención aparte. Y es que Delevingne se coloreó de amarillo la zona de las orejas y las cejas y tiñó su pelo de color malva.
SE CONFUNDIÓ DE TEMA
Aunque Beyoncé no acudió a la gala de este año, la familia Knowles estuvo representada con la asistencia de la hermana de la cantante. La también cantante parece que no comprendió muy bien cuál era la temática de la gala ya que el vestido de Iris Van Herpen parecía más adecuado para el tema futurista de hace unos años que con el religioso.El diseño, de látex, cuenta con un escote palabra de honor y una falda formada por extrañas figuras. Las botas por encima de la rodilla, también de látex y tacón transparente completan el look. Como toques finales, Solange Knowles lució una aureola en la cabeza, además de un pañuelo que le cubría el cabello, unos pendientes de aro y varios brazaletes. Otra cosa que tampoco entendemos es la red que la cantante utilizó en forma de bolso.