Martín Lamothe ha apostado por los tonos otoñales en Madrid Fashion Week con un desfiles donde el negro, el marrón y el verde han sido los tonos dominantes, sutilmente combinandos con discretos naranjas en estampados geométricos mínimos.
La marca ha sido contundente en sus formas. Durante el primer tercio de la colección hemos visto estructuras muy marcadas en chaquetas rígidas de hombros anchos que ocultan la silueta femenina. Este corte tan masculino se combinó con pantalones pitillo que se cortaban a la altura de los tobillos. Aquí los trajes de chaqueta se combinaron con minifaldas, todo ello cubierto por un discreto patchwork de cuero negro en formas geométricas o con éste simulando macrotachuelas sobre el torso.
Los diseños más discretos llegaron en un apagado verde que cubría vestidos con escotes de espalda o trajes de chaqueta con solapas finas.
Estampados en tonos chocolate
Los diseños monocolor se combinaron sobre la pasarela con estampados geométricos en tonos chocolate con ligeras concesiones al naranja. Aquí la silueta femenina cobra protagonismo gracias a los ligeros materiales empleados por la marca, que aportaban movimiento a las modelos.
Entre las piezas más destacadas de la colección podemos resaltar el pantalón palazzo, una de las tendencias clave de la última temporada que volverá a conquistar los armarios de las adictas a la moda. La firma busca su versión más ligera en sus estampados clave para este otoño, no aptos para las más discretas.