El diseñador y modisto madrileño ha comenzado el desfile en la Fashion Week Madrid con gran originalidad. Al fondo de la pasarela había una caja gigante de madera como si acabara de llegar de fábrica. Juan Duyos ha abierto la caja por en medio y en su interior estaban todas las modelos. Una a una han ido desfilando sin apenas pararse al final para posar.
La música de orquesta ha creado un ambiente de tensión. Instrumentos de cuerda, aumentado el ritmo conforme iba avanzando el desfile, han otorgado un gran dinamismo y velocidad, en el que apenas había tiempo para observar al detalle las prendas. El vuelo de las faldas y los vestidos daban aún más movimiento a la colección.
Con su colección 'Velada' ha hecho un repaso de épocas anteriores con claras influencias Pedro Rodríguez, Balenciaga o Elio Berhanyer y que el diseñador ha querido recuperar con siluetas longilíneas en contraste con otras más voluminosas.
"Se está volviendo a la moda lenta, personalizada y de largo recorrido, un lujo real", ha dicho a EFEstilo el diseñador madrileño. Los tonos pastel nuevamente han sido los protagonistas en esta semana de la moda que definirá las tendencias del próximo año. El blanco ha estado presente en casi todas las prendas, normalmente ejerciendo de base de los rosas y amarillos. El color salmón y el crema han estado acompañados de destellos dorados y amarillos.
Colección cargada de sentimiento con prendas de lujo
Gasas brocadas y organzas de seda daban el prestigio que se merecían los ornamentados vestidos que reinaron en la década de los noventa. Prendas minimalistas con vestidos palabra de honor, de vuelo, anchos blusones y vestidos tipo túnica. Aparte del cinturón dorado que ha estado presente en casi todas las prendas, no ha habido casi complementos. Las gafas de sol hexagonales y los peinados con coletas apretadas daban el toque de elegancia y glamour.
Duyos ha dedicado esta colección a su madre, lo que dota de un significado especial el diseño de cada prenda. Romanticismo y feminidad han quedado patentes sobre la pasarela. Los estampados florales no podían faltar. En 1997 presentó su colección ' Naturama ' y siempre evoca a la naturaleza.
Para poner fin al desfile, la modelo Alla Kostromichova, salió con el móvil en la mano grabando a los asistentes mientras paseaba en fila junto a sus compañeras.