La edición de los Grammys 2018 tenía lugar con una reivindicación especial, una rosa blanca en señal de protesta por los abusos sexuales, que lucían tanto hombres como mujeres en la alfombra roja. Una entrega que sobretodo atraía buenos looks, tuvo también sus peores galas de la mano de Cardy B.
Pink con un traje de plumas multicolorLas plumas del arcoiris
La entrega de los Premios Grammy celebrada tradicionalmente en Estados Unidos, era el escenario de looks de auténtico espanto. Uno de ellos, es el que lucía Pink con una gran variedad de colores que no eran para nada acertados.
El traje escogido era un palabra de honor de tiro largo con plumas de tonalidades lila, azul, negro y rosa a partes iguales. Una combinación de colores que para nada era bonito a nivel visual. Por su parte, el vestido se envolvía con un cinturón negro en la parte superior de la cintura.
El maquillaje y peinado son elegantes y naturales, pero sin embargo se ven eclipsados por la desastrosa pieza que atrae toda la atención.
Es un look del que esperemos que Pink se recupere pronto. A pesar de llevar la reciente tendencia de las plumas, todo hay que saber llevarlo y en qué medida aún siendo tendencia, es una prenda apropiada o de auténtico espanto.
Cardi B con un vestido blanco con detalles geométricosEl traje de la reina de corazones
No sabemos exactamente qué parte del traje de Cardi B es el que menos nos gusta. Los cortes asimétricos y la tela crean un efecto visual de lo más desagradable para una entrega de premios de tal relevancia.
La cantante apostó por una pieza blanca corta, con una cola que va desde la parte superior hasta el suelo. El escote es de V, y la tela es de encaje, pero da la sensación de ser antiguo. Las diferentes capas de las que se compone el vestido dan un exagerado volumen.
En lo que se refiere al calzado llevaba unos tacones transparentes de encaje, y completa su look con un recogido alto con mechones sueltos y un maquillaje que sitúa como protagonista a las pestañas.
Una apuesta por parte de la cantante que es excesivamente voluminosa, y que está compuesta de una tela que es de lo más horroroso. Una prenda que no debería haber salido del armario de la artista y menos para una alfombra roja.
Hailee Steinfeld con unas botas violetas brillantesLas botas de locomia
Un claro ejemplo de que un detalle desmorona un look de sobresaliente es el que lució la cantante Hailee Stainfeld en la alfombra roja de los Premios Grammy.
Para la ocasión apostaba por unas botas altas de tonalidad violeta extravagante que para nada tenían que ver con el conjunto. Un detalle que resaltaba de la manera menos apropiada en la gran ocasión.
El look se completaba con un vestido de raso negro, con escote palabra de honor, y una abertura en la zona inferior que dejaba ver las piernas, y de esa manera las espantosas botas. El beauty look era muy apropiado, con un claro protagonismo de la sombra de ojos azul, y la melena suelta con ondulaciones.
Es sin lugar a dudas, el peor calzado que ha pisado la alfombra de los tradicionales premios. Las botas nos sorprendieron totalmente, y más siendo lucidas por la estilosa cantante.
Kali Uchis con un mono rosa con estampados plateadosEl vestido ochentero de los horrores
El estilo de los ochenta es una moda en constante reciclaje, y que crea tendencias hasta el día de hoy. Pero hay que tener en cuenta que no son todas las modas las que vuelven, y este vestido no sabemos de donde ha salido, pero es un auténtico espanto.
Kali Uchis apuesta por un mono rosa fucsia con estampados geométricos plateados a lo largo de toda la pieza. Tiene un acabado en las mangas con forma de amplios volantes y los extremos de los pantalones con corte de campana.
La melena suelta termina el look con una sombra de ojos rosa blanquecina y un pintalabios que delinea de color más oscuro su comisura. Otro de los errores por parte de la cantante.
Es un look que bien podría servir para carnavales, o una fiesta temática de la era, pero jamás para una alfombra roja y menos una que acoge a los Premios Grammy.
Sheinelle Jones con un vestido negro de estampadosLos estampados de espanto
En este look son los estampados los encargados de orquestar la caída en picado de todo un look. Sheinelle Jones lucía un vestido con un estampado de lo más feo para la ocasión.
El traje con escote de palabra de honor, estaba repleto de un estampado de semicírculos naranjas con triángulos a rayas grises, con el fondo de color principal negro. El corte del vestido es estilo sirena con la parte delantera más corta.
El look se completa con un recogido bajo con pelo suelto, unos pendientes largos y un maquillaje cuyo protagonista es el delineado negro y la sombra de ojos de tonalidades grisáceas.
Un vestido sacado de los horrores debido a un estampado que muy lejos está de ser el apropiado para una verdadera alfombra roja de tal magnitud.
