Para la mayor parte de los diseñadores de moda, la posibilidad de crear una colección de alto standing que genere una lista de espera es como ganar la lotería. Una prenda de coleccionista, ya sea un zapato o bolso, puede resistir las tendencias y las estaciones, convirtiéndose a menudo en un negocio en sí mismo. Rick Owens entiende muy bien el concepto ya que lleva más de una década vendiendo sus codiciadas botas y zapatillas de culto. Sin embargo, hace unos años comenzó a sentirse incómodo con el frenesí y la expectación que generaba alguno de sus lanzamientos especiales. "La necesidad y el desenfreno del mercado del calzado comenzó a preocuparme un poco", aseguró en una reciente entrevista, a lo que añadió: "Cuando algo explota así, adquiere este tono de estatus y consumo, y quería cambiar eso". En todos los rincones del mundo cientos de personas acampan antes del anochecer y durante para comprar zapatillas de edición limitada, por lo que el siguiente paso lógico es abordar el concepto de responsabilidad.
COMPROMISO SOCIAL Y CON EL MEDIO AMBIENTE
Y es que, cuando el consumidor compra calzado, raramente piensa en el impacto que tiene en el medio ambiente su proceso de producción. Es prácticamente imposible imaginar el agua que se utiliza, ni la energía. Tampoco las emisiones de carbono y gases de efecto invernadero. Sin embargo, en la práctica el mercado del calzado es uno de los más contaminantes con la naturaleza. El apellido Owens es sinónimo de responsabilidad y ética personal y ambiental. Casi todas las zapatillas están fabricadas con toneladas de plástico, a veces con tantas partes que son imposibles de separar para su reciclaje. "Hacer trofeos de plástico tal vez no sea lo mejor que se puede hacer", afirma; "Así que hice una investigación en busca de la compañía de calzado más responsable que pude encontrar ".
Un calzado ecofriendlyUna investigación que dio sus frutos y le llevó hasta la firma de origen francés fundada por Kopp y Ghislain Morillion, Veja. Conocida por la fabricación y puesta en el mercado de zapatillas con muy bajo impacto para el medio ambiente y fabricadas en Brasil. A diferencia de otras marcas, Veja contribuye al mercado del diseño con materias primas naturales y construye su cadena de suministro de forma ética y responsable. Una firma en la que, ni la tecnología ni la innovación son su seña de identidad. Una firma que no se anuncia, lo que les permite invertir en producción ya que, a diferencia de otras marcas que destinan grandes sumas de dinero a campañas de publicidad vertiginosas, esta marca francesa lo dedica a encontrar los materiales más sostenibles, mejores prácticas de elaboración y financiación de proyectos sociales.
Una ética laboral con la que se identifica el diseñador. Una colección de zapatillas completamente ecológicas en tres colores diferentes -negro, gris y beige- y que ya decoran los escaparates de diferentes puntos de venta de Veja alrededor del mundo, así como en su web. Simpleza y funcionalidad en modelos adornados con la mítica 'V' de Veja y fabricadas con más de un cuarenta por ciento de material orgánico. Cuentan con una suela fabricada con aceite de plátano, cáscara de arroz y caña de azúcar, sobre la que reposa una plantilla forma fabricada con caucho natural de Brasil. Un diseño que cuenta con un tejido confeccionado a partir de botellas de plástico recicladas y tratadas de forma ética para conseguir un tejido traspirable, con forma y sin costuras.
