Un año más llega la Alta Costura a París. Se ha levantado el telón de la pasarela y uno las primeras firmas en desvelar sus propuestas para la próxima primavera/verano 2015 ha sido Schiaparelli, que ha presentado la colección 'Stop, Look & Listen' y sin director creativo después de que Marco Zanini dijera adiós a la casa el pasado mes de noviembre.
Elsa Schiaparelli presentó su colección 'Stop, Look & Listen' en enero de 1935, cuando se mudó a su nueva casa de costura situada en el número 21 de Place Vendôme. 80 años después, Schiaparelli trasciende esta temática siguiendo el espíritu vanguardista de Elsa de mezclar Haute Couture, live performance y colaboración con artistas.
Look naranja de Schiaparelli en la Semana de la Alta Costura de París primavera/verano 2015Su nueva versión se desafía con la experiencia 'Sound & Vision' de Jean-Paul Goude que se convierte en el catalizador de fondo de la actitud vencedora de la mujer Schiaparelli y del extraordinario savoir-faire de la Haute Couture.
La colección mostrada es una oda a la mujer segura de sí misma. Elementos audaces se combinan con detalles exquisitos. Siluetas alargadas que exhalan feminidad y seducción a la vez que personifican la personalidad ecléctica e inconfundiblemente chic de Elsa. Se trazan sobre la atemporalidad del lenguaje de Schiaparelli, jugando así con su obsesión por corazones perforados, candados y la Osa Mayor.
Una delicada mano infunde relevancia en la mujer de hoy. Un diáfano vestido de malla incorpora un delicado bordado de diminutas y estrellas de plumas de vivos colores. Un vestido arlequín de seda en shocking pink y bermellón demuestra la excelencia de la costura. Se confecciona en un patchwork con motivos de rombos de distintos tamaños. Unas ingeniosas manos en trampantojo cierran un collar con una estrella de cristal en un vestido drapeado.
Vestido de Schiaparelli en la Semana de la Alta Costura de París primavera/verano 2015Carla Bruni, Alice Eve y Anna Wintour, en el front row
Sastrería masculina que a su vez es abiertamente femenina. Esmóquines de corte impecable en sarga de lana y seda o en lamé de terciopelo que esconden grandes lazadas. Las chaquetas presentan un bordado de cadena inspirado en uno de 1938 y los bolsillos se embellecen con plumas en vivos tonos. Bordados a mano y una cascada de corazones cubriendo la espalda de abrigos suaves de napa.
Un sinfín de pequeños detalles sobre una colección de prendas que ha mostrado Schiaparelli en un espectáculo en el que ha contado con algunas caras conocidas en el front row como ha sido el caso de la editora de Vogue Anna Wintour, la actriz Alice Eve o la mujer de Sarkozy Carla Bruni.
