La sociedad actual en la que vivimos se rige por un ritmo acelerado, un estilo de vida en el cual tenemos que estar pendientes de todo sin olvidarnos de nada. Lo rápido y sencillo es la nueva moda, ya que el tiempo es oro y no podemos malgastarlo en asuntos banales. Este patrón también se ha impuesto en la moda, que es observadora pasiva de cómo el fast-fashion come terreno a un proceso de diseño más pausado y personal.
Hoy en día lo único que cuenta es producir más y con rapidez para, de esta forma, llegar al máximo público posible. Por eso, cada vez son más las firmas que alzan sus voces para posicionarse en contra de este nuevo modelo de negocio, un reclamo para volver a una moda en el que el diseño y la producción son procesos hechos con mimo y cuidado. La última de las marcas que le ha declarado la guerra al fast-fashion es Adolfo Domínguez, y es que la marca española lleva reinventándose desde hace un año, momento en el que Adriana Domínguez tomó las riendas de la dirección general de empresa.
SABIDURIA POPULAR
'Sé más viejo' es la nueva campaña con la que Adolfo Domínguez aboga por volver a los tiempos donde las creaciones eran lo primero y el negocio lo segundo, una época en la que hacer diseños de referencia era más importante que ganar dinero. Con frases como 'Compra menos, compra mejor' o 'Sostenible es una falda que te dure 10 años', la marca de moda española pretende apelar a la conciencia de los compradores y frenar esta moda impulsiva donde las tendencias apenas duran unos días.La calidad, el diseño especial y una producción cuidada es lo que debería pesar a la hora de comprar una prenda. Y es que la propia firma trata de reivindicar "su esencia como firma de moda de autor y se postula a favor de la sostenibilidad de lo duradero y el estilo frente al fast fashion". Como refuerzo de la campaña, Adolfo Domínguez ha contado con la colaboración de Valentina Yusen. La modelo rusa de 63 años no ha dudado en ponerse delante del objetivo con divertidas poses y haciendo muecas a la cámara para, de esta forma, demostrar que la moda no tiene que tener fecha de caducidad.