'Unhate' ('Contra el odio'), que así se llama la nueva campaña publicitaria de Benetton, ha desatado la polémica. Primeros ministros, presidentes e, incluso, el propio Papa se han visto implicados, sin tener conocimiento, en un mensaje de protesta con ellos como protagonistas.
Si por algo se caracteriza la firma italiana es por sus campañas publicitarias atrevidas, donde buscan la polémica y el ruido. En esta ocasión, con 'Unhate' también han conseguido su propósito: en poco más de unas horas, los anuncios han dado la vuelta al mundo y numerosos medios se han hecho eco de ella.
En esta ocasión, y con la excusa de la defensa de la paz, la marca de moda Benetton ha realizado unos fotomontajes en los que personajes influyentes del mundo de la política y la religión se dan besos fugaces e inesperados, imposibles de ver en la realidad. Barack Obama besando a Hugo Chávez, Ángela Merkel a Sarkozy y el Papa Benedicto XVI al imán sunita de la universidad egipcia de Al-Azhar, Ahmed el Tayyeb son algunas de las polémicas imágenes que hemos podido ver.
Además, la manera en que Benetton ha hecho pública la campaña también ha despertado el interés de todos, ya que se ha servido de lugares principales de Italia para desplegar enormes pancartas con los mensajes. Así, en Milán, Benetton desplegó un cartel del ósculo entre Merkel y Sarkozy a los pies de la categral, mientras que, en Roma, a escasos metros de la plaza del Vaticano, se exponía la imagen del beso entre los dos dirigentes religiosos.
El Vaticano anuncia medidas legales contra Benetton
Tal es la polémica que ha desatado la campaña que el gabinete de comunicación de la Santa Sede se ha quejado formalmente, consiguiendo que Benetton retire la fotografía de Benedicto XVI besando al imán Ahmed el Tayyeb. En palabras de su jefe de prensa: "Se trata de una grave falta de respeto hacia el Papa, de una ofensa a los sentimientos de los fieles, de una demostración evidente de cómo en el ámbito de la publicidad se pueden violar las reglas elementales del respeto a las personas para atraer la atención mediante la provocación".
La Santa Sede también ha declarado su firme convicción de tomar acciones legales contra la marca: "La Secretaría de Estado está valorando los pasos a tomar ante las autoridades competentes para garantizar una justa tutela del respeto de la figura del Santo Padre".