Con la comodidad, los tejidos naturales y las piezas de estilo masculino abanderan la nueva temporada de Yerse con el que combatir el frío de cara a la próxima temporada otoño/invierno 2016/2017. Si las demás firmas apuestan por una mujer fuerte, decidida, independiente e innovadora de la mano de piezas vistosas y arriesgadas, la firma barcelonesa muestra las mismas características pero con un aire más relajado gracias a los diseños holgados y sencillos de la nueva colección.
Tonalidades clásicas
Nada de looks imposibles, ni piezas básicas y aburridas, ni complementos que más que abrigar solo sirven para adornar. Con Yerse la temporada invernal es posible superarla sin pasar frío y estando incómoda gracias a los tejidos más clásicos, naturales y asequibles : lana gruesa y algodón. En colores más que tradicionales pero con un giro de patrones, las piezas se caracterizan principalmente por los tonos rojos, negros, azules y blancos junto a colores que están -y casi nunca pasan- de moda, como el dorado, el verde oscuro y rosa chicle.
Comodidad como 'must'
La propuesta para el día a día de la mujer ideal de Yerse -lo que quiere decir comodidad, sencillez y elegancia- se presentan en formas de maxi vestidos, monos y abrigos oversize, faldas cortas y largas con flecos y ajustadas, jerséis de cuello alto y amplios pantalones palazzo. Una línea que viene dispuesta a llenar el armario femenino con aires masculinos, inspiración que encontramos en los estampados de cuadros tradicionales y la sencillez.
Estampados sencillos serán los elegidos para decorar las piezas, dejando a un lado los más arriesgados y psicodélicos. La sencillez se viste y se lleva no solo en la ropa, sino también en la actitud. Es así como el maquillaje adquiere tonos más suaves y nada recargados, acompañados por recogidos simples y cómodos con el que combinar los conjuntos de Yerse.
Recorrido de lujo
Entre las modelos elegidas para desfilar con las piezas clave de la colección -Rocío Curat, Joana Sanz, Daniela Braga, Katya Konstantinova...-, uno de los rostros reconocibles que representó esta temporada fue la española Alba Galocha, que se ha alzado con el peso de grandes firmas nacionales e internacionales de la moda. Un hueco que se ha ido haciendo entre las grandes modelos gracias a la imagen sofisticada y andrógina de la modelo.